El Ayuntamiento de Cáceres dedicará 3,9 millones del remanente a cancelar la deuda con el SEPEI

La concejala de Economía, María Ángeles Costa, ha detallado el destino que tendrán 9,4 de esos 13,6 millones del remanente. Otros 2,5 millones irán a parar a un plan público de vivienda clon el que se busca poner en el mercado de alquiler pisos asequibles para jóvenes y colectivos vulnerables, un plan que es parte del acuerdo de presupuestos con Unidas Podemos. Consta de 1,5 millones para comprar viviendas en distintas zonas de la zonas de la ciudad, y un millón más para reformar 41 pisos propiedad del Ayuntamiento, que serán para alquileres sociales.

Se han reservado 1,2 millones para incrementar el precio de salida del nuevo contrato de suministro energético a los edificios municipales, después de que la empresa que prestaba el servicio rescindiera el contrato unilateralmente y hubiera que acudir a la comercializadora de último recurso, en este caso Iberdrola, con el consiguiente encarecimiento de los precios.

También habrá 480.000 euros para actuaciones en los barrios, en concreto 170.000 para mejorar la accesibilidad en Llopis Ivorra con obras de pavimentación, 35.000 para restaurar los bancos del Paseo Alto, 25.000 para alcorques en la calle Gil Cordero, 100.000 para mejorar la conectividad de la Ribera del Marco abriendo una travesía que une las calles Tenerías y Caleros y 150.000 para una zona de juegos infantiles en Los Castellanos.

Otra partida de 269.563 euros con cargo al remanente será para mejoras los equipos informáticos del Ayuntamiento, y 100.000 más para renovar el sistema de climatización del edificio consistorial.

Se han reservado 301.923 euros para certificaciones de obras y modificados de contratos en diversas actuaciones, en concreto los nuevos campos de fútbol de Pinilla, el futuro corredor peatonal entre el parque Gloria Fuertes y el parque del Príncipe y la asistencia técnica de la primera fase de la restauración de la muralla.

También salen del remanente 674.269 euros para un premio de cobranza por la tasa de gestión, tramitación y recaudación de las multas de tráfico de los años 2018, 2019 y 2020 por parte del OAR de la Dioputación, según Costa «debido a una regularización que se ha hecho este año al haberse estado cobrando menos de los que se pactó en 2016».

El pleno ha aprobado además los presupuestos para 2022, que ascienden a 75,4 millones de euros, un 4,3% menos que el año pasado al no incluirse el crédito de ocho millones que se solicitó para realizar inversiones. Las cuentas han contado con los votos de PSOE, Unidas Podemos, y el concejal no adscrito Teófilo Amores, que han sumado los 13 votos necesarios, informa Europa Press.

El PP ha votado en contra al igual que los concejales no adscritos Francisco Alcántara y Mar Díaz, y la portavoz de Ciudadanos (Cs), Raquel Preciados, mientras que el otro concejal de la formación naranja, Ñete Bohigas, se ha abstenido en la votación en esta sesión extraordinaria en la que se ha conocido que el remanente de tesorería del ejercicio anterior arroja un superávit de 13 millones de euros.

El pleno, que ha tenido que suspenderse diez minutos por una protesta de ganaderos encabezada por Asaja Extremadura, ha aprobado también los presupuestos de los organismos autónomos, incluidos en la cuenta general, que ascienden a 8,66 millones de euros. De ellos, 4,2 pertenecen al Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS); 1.544.111 a la Universidad Popular; 1.068.343 al Instituto Municipal de Juventud (IMJ), y 298.625 al Instituto Municipal de Deportes (IMD).

La concejala de Economía, María Ángeles Costa, ha destacado que «es un presupuesto equilibrado y expansivo». Así, ha recordado que en 2019 al comienzo de la legislatura el presupuesto no llegaba a los 69 millones de euros, y ahora ya supera los 75, a los que habrá que añadir, ya que no se recogen, el plan de empleo local por más de 3 millones de euros y los fondos del Plan de Recuperación que se invertirán en la ciudad procedentes de Europa, cuyos proyectos aprobados alcanzan los 12 millones de euros.

Los impuestos directos superan los 35 millones, frente a los casi 32 del año pasado, lo que supone un incremento de en torno al 10%, debido al aumento del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM).

«Este dinero servirá para poder llevar a cabo inversiones en la ciudad y apoyar a quienes más lo necesitan», ha defendido la concejala de Economía, María Ángeles Costa, que ha informado de que los impuestos indirectos suponen casi 5 millones de euros.

En el total de tasas y otros ingresos suponen casi 10 millones de euros, con un incremento del 4% respecto al año anterior; las transferencias corrientes ascienden a unos 23 millones de euros; y las transferencias de capital a 2 millones de euros.

En cuanto a los gastos, los de personal se elevan a 27 millones de euros; los corrientes casi a 28 millones, lo que supone un incremento del 10%; y las transferencias corrientes 13,9 millones, que se han incrementado en más de un 6%, ya que «ha aumentado la aportación a los organismos autónomos pensando en las familias más vulnerables, la formación, la juventud, y el deporte», ha dicho Costa.

En el capítulo de inversiones se contempla una dotación de 4 millones para atender a las necesidades de la ciudad tanto en materia de infraestructuras, accesibilidad, y «para hacer una ciudad mejor para los cacereños y cacereñas». También ha crecido la dotación en cultura (un 14%) y en turismo (28%).

Según Costa se trata de un presupuesto en el que se tienen en cuenta las necesidades de la ciudadanía, «para apoyar a quienes peor lo están pasando por la crisis, con inversiones para seguir mejorando nuestra ciudad y todos sus barrios, para seguir mejorando servicios que se prestan a la ciudadanía, y con una apuesta por el medio ambiente, el turismo y el comercio», ha resaltado.

Por su parte, el alcalde, Luis Salaya, ha reconocido la tardanza con la que llega la aprobación de estas cuentas, pero sí ha defendido que se ha mejorado la recaudación y que se han cobrado deudas atrasadas como la que tenía la Junta de Extremadura con el IBI. «Se aprueba un presupuesto fuerte para seguir avanzando en la ciudad», ha dicho el regidor.

Desde la bancada de la oposición, el portavoz del PP, Rafael Mateos, ha criticado el «caos» en la gestión económica del Ayuntamiento cacereño, que ha llevado a aprobar un presupuesto cuando han pasado seis meses del ejercicio. Por su parte, el concejal no adscrito, Francisco Alcántara, también ha hecho alusión a la «incapacidad» para gestionar las cuentas municipales, y ha puesto como ejemplo que el superávit de más de 13 millones de euros evidencia que «no saben cómo gastarse el dinero».

En el pleno se ha aprobado además con los votos a favor de PSOE, Unidas Podemos, el concejal de Ciudadanos Antonio Bohigas, y los concejales no adscritos Teófilo Amores, Francisco Alcántara y Mar Díaz; y la abstención del PP y de la concejala de Ciudadanos Raquel Preciados, el bono gratuito del bus urbano para menores de 16 años, una medida propuesta por Unidas Podemos. Es una medida piloto de 6 meses de duración que será posible extender más allá si se entiende que los resultados son satisfactorios. Ha salido adelante por unanimidad la incorporación de un autobús estándar de 12 metros 100% eléctrico en sustitución del autobús estándar de 12 metros diésel pendiente de incorporar, con el que se pretende, según ha indicado el concejal de Servicios Públicos, Andrés Licerán, "la reducción de gases contaminantes como el CO2 y la reducción de la contaminación acústica que los vehículos de estas dimensiones provocan en nuestra ciudad".