Apuntalan la higuera bicentenaria del Palacio de Carvajal de Cáceres por riesgo de caída de ramas
La Junta, que no lo reconoce como singular, recomienda llevar a cabo la poda de este ejemplar, que dentro tiene un nuevo brote
Con su tronco nudoso y deforme la higuera del patio del cacereño Palacio de Carvajal es uno de los elementos sobre el que ... se posan las miradas de los que acceden a este recinto gótico y renacentista enclavado en la ciudad monumental. Datada con una antigüedad de unos 260 años esta higuera se ha convertido en el símbolo de este espacio y los guías turísticos dan detalles sobre este ejemplar de Ficus carica, una especie que procede de Asia pero que es muy común en torno a los países mediterráneos.
El árbol, con las ramas desnudas como corresponde al invierno, cuenta con un especie de muleta como soporte y está precintada para evitar la caída de las ramas. Según explica la Diputación de Cáceres a principios del verano se cayó una rama de esta higuera y se solicitó a la Junta de Extremadura un informe para solicitar si se podía declarar árbol singular. La Junta respondió y desestimó esta solicitud. Sí se recomienda llevar a cabo una poda específica con unas recomendaciones para que crezca convenientemente, teniendo en cuenta el grosor y la longitud de las ramas.
Pero este árbol tiene, de alguna forma, una sorpresa en su interior, porque la vida no se detiene. Dentro de ese tronco protuberante hay un nuevo brote, es decir, una nueva higuera que continuará dando sombra a ese rincón privilegiado que da cabida a actividades culturales dentro del Womad o del Festival de Teatro Clásico. Se considera un ejemplar en regresión, pero el brote garantiza su supervivencia.
Emblema
¿Por qué un árbol que es un emblema no es considerado singular? Según la Ley de Conservación de la Naturaleza y de Espacios Naturales de Extremadura que se aprobó en el año 1998 se consideran árboles singulares aquellos ejemplares o agrupaciones concretas de árboles, autóctonos o no, en atención a sus características singulares destacables que los hacen especialmente representativos, atendiendo a su edad, tamaño, historia o valor cultural, belleza, ubicación u otras características análogas.
La historia de este árbol está detallada en la web del proyecto de educación ambiental Naturalmente Cáceres, que gestiona la concesionaria Talher. «En 1960 Dolores de Carvajal procedió a la reconstrucción del palacio y para ello adquirieron dos casas que estaban adosadas al palacio, que tenían sus corrales correspondientes y que son los que dan lugar al jardín del palacio. Parece ser que es la razón de que exista la higuera centenaria ya que, en uno de ellos, allí se encontraba». El matrimonio, explica el texto de Talher, quiso cortarla, pero la higuera volvía a brotar una y otra vez, intentaron taparla con cal viva, y se dice que ese es el motivo, junto con su edad, por el cual la base del tronco está deformado.
La higuera centenaria tiene una altura total de unos 7 metros y un perímetro de tronco de 2,60 (a 1,30 de altura), además de un enorme tronco nodular, con epidermis grumosa, explica la empresa Talher.
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