La Segunda Guerra Mundial contada al milímetro
Exposición. ·
La asociación de modelistas de Badajoz recrea 307 maquetas bélicas que se pueden visitar en el Hospital Centro VivoLos escombros de la cúpula Genbaku de Hirosima, la icónica estructura del único edificio que permaneció en pie cerca del lugar donde explotó la primera ... bomba atómica el 6 de agosto de 1945, es la maqueta con la que la Asociación de Modelismo Estático de Badajoz (Ameba) cierra la primera exposición de maquetas que se realiza en Badajoz para contar el desarrollo de este conflicto bélico.
«Aquí se aprecia la evidencia del avance tecnológico que supone la II Guerra Mundial, que comenzó con los alemanes atacando Polonia con muchos caballos, y termina con una bomba atómica cinco años después», explica uno de los organizadores de la exposición, Gerardo Calatayud.
Un mapa del mundo explica a los visitantes cómo se repartieron el mundo las principales potencias entre 1939 y 1946. «En este período nació una nueva forma de hacer la guerra, que es contra la población civil. Hasta entonces, en las contiendas antiguas la población era una riqueza que había que conquistar», dice para dar la bienvenida a la exposición el presidente de Ameba, Antonio Rodríguez.
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En este conflictos las tácticas para conquistar territorios fueron muy importantes, y esto lo explican las 307 maquetas que representan no solo los escenarios del conflicto, también los medios empleados para llevar a cabo las campañas.
«Estados Unidos inicia una campaña de ataques con submarinos para cortar las rutas de suministro de Japón hacia zonas que habían conquistado», dice Rodríguez.
Una lancha, la PT-117, es donde Kennedy combatió en la guerra. En la exposición está representada a escala 1:72 es decir, un centímetro de la maqueta son 72 en la realidad. «Esta lancha atacaba con torpedos a otros barcos. Su ventaja era la velocidad, eran muy rápidas, y esta es en la que Kennedy alcanzó fama antes de ser presidente de los EE UU», subraya el miembro de Ameba, que destaca que en la muestra están presentes tres de los escenarios en los que se desarrolló la contienda, Europa, el Pacífico y el Atlántico.
«En ellos tuvieron lugar muchísimas batallas. En la del Atlántico norte fue muy importante el arma submarina, porque ahí el desarrollo tecnológico marcó el desenlace», rememora.
En la exposición también se puede observar un diorama que representa el ataque de Alemania a la Unión Soviética. En él numerosos tanques a escala 1:10 atraviesan los campos de cereales de Ucrania. «Se asemeja un poco a lo que estamos viendo ahora, pero en dirección contraria», subraya.
A este ataque los alemanes lo llamaron 'operación Barbarroja'. Con más de tres millones de soldados y miles de tanques y aviones fue el mayor despliegue militar de la historia, ya que el objetivo de la Alemania nazi era sojuzgar a la Unión Soviética para hacerse con sus recursos naturales.
No lo consiguieron, de hecho esta operación debilitó a su ejército, antes del desembarco de Normandía, que los aficionados han representado con arena de playa y una mezcla de pegamento y agua, varias lanchas y decenas de soldados. Para esta recreación viajaron a la zona por donde las tropas aliadas entraron en Europa.
Los santos lugares
«Para nosotros no solo es importante la documentación, que sacamos de libros, películas, prensa y fotografías de la época. Viajar al sitio que vamos a representar, o a los 'santos lugares', como les llamamos nosotros, es esencial para la representación», afirma.
De no ser por este viaje, que hicieron hace un año, esta exposición no hubiese sido posible.
A ellos les sorprendió que los escenarios apenas habían cambiado desde entonces. La playa Omaha –cuentan– está prácticamente igual que cuando la tomó el ejército aliado.
También visitaron la iglesia de Sainte-Mére, donde colgó la primera bandera norteamericana al ser la primera población liberada. Es famoso el episodio del paracaidista de la 82 división aerotransportada que se quedó enganchado en el campanario, y así lo cuenta Catalayud en el diorama de esta batalla.
«Casi todas las figuras están representadas en escalas 1:72, 1:35 y 1:700. Esta última no permite representar figuras humanas, debido a que su tamaño sería de apenas unos milímetros», explica Rodríguez. Con esta exposición, sus promotores pretenden enseñar a los jóvenes que el ser humano es capaz de lo peor, de hecho la próxima semana recibirán en el Hospital Centro Vivo a varios institutos de la ciudad. El público también podrá visitarla hasta el próximo 11 de mayo.
En su representación pasan de puntillas por el holocausto, no han querido ser muy cruentos, porque pese a que la contienda provocó avances tecnológicos, la tragedia humana fue terrible, como la que aseguran que está causando Putin en la actualidad.
«Su pensamiento sigue siendo el de la superioridad de unos sobre otros. También cree que la conquista es un derecho, pero esto ya no es así. Algo positivo de la guerra y con lo que termina la exposición fue que facilitó la creación de la UE».
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