Las otras plagas del Guadiana

La directora del programa de conservación de la Dirección General de Sostenibilidad de la Junta, María Jesús Palacios, analiza en este reportaje las otras plagas que afectan al río a su paso por la ciudad a pocos días de que empiece la colocación de unas mantas vegetales para secar el nenúfar y acabar con la plaga que forma tapices vistosos. Palacios insiste en la importancia de la concienciación ciudadana para evitar que sigan proliferando.

El black bass, codiciado en los concursos de pesca, el lucio, el pez gato, el alburno y la perca han ido ganándole el terreno a otras especies que siempre nadaron en Badajoz como el fraile, el barbo o el jarabugo. Palacios indica que es muy complicado controlar las especies de peces que llegan de otras aguas. Aun así, sabe que complican la subsistencia a los ejemplares autóctonos en su río de siempre.

En las orillas se ven conchas pequeñas, como berberechos o chirlas. En realidad son almejas asiáticas, que compiten con el mejillón de río y causan muchos problemas en las infraestructuras hidráulicas. María Jesús Palacios explica que la CHG invierte muchos esfuerzos en acabar con ella, pero admite que es complicado. Una investigación demostró que el agua oxigenada las mataba dentro de un circuito cerrado, pero no se puede luchar contra ellas con peróxido de hidrógeno en aguas abiertas. Por eso pide a los pescadores, piragüistas y usuarios del río que desinfecten cualquier caña, embarcación o elemento que vaya a introducir en el cauce. «Hay que desinfectarlo todo al pasar de una masa de agua a otro porque las larvas son muy pequeñas, aun no han desarrollado la concha y apenas se ven, pero se desplazan con mucha facilidad». Dice que basta con pasar un paño con agua y lejía.

«El Guadiana es el único río de España que se ha librado del mejillón cebra», valora María Jesús Palacios. La experiencia de la cuenca del Ebro, donde ha causado muchos gastos, hizo que se analizaran las aguas de todo el país. «Lo importante es que no lleguen, porque cuando se extiende como el nenúfar o el camalote, es ya muy complicado de eliminar».

El destino de muchas tortugas verdes, pequeñitas, que los padres regalan a los hijos cuando no quieren un perro en casa es el río. Llegan a medir un metro y muchas familias las llevan al Guadiana pensando que allí estarán mejor. Sin embargo, suponen una amenaza para los galápagos leproso y europeo. Las tres especies son carnívoras y comen lo mismo, les gusta realizar las puestas de huevos en las mismas zonas y prefieren colocarse sobre piedras para solearse. La tortuga de Florida es de mayores dimensiones que las demás y más agresiva a la hora de cazar o acomodarse bajo el sol. Así que cuantas más tortugas de Florida haya en el río, menos galápagos. Han puesto trampas para cogerlas. Las que caen terminan en las instalaciones de Amus o en Sierra de Fuentes.

Originarios de África, los gansos del Nilo vuelan en el cielo de Badajoz. Suelen estar en granjas, pero se escapan o las sueltan si son agresivas con otras aves que convivan, como las ocas. Tienen controladas bandas de hasta 35 individuos. Hacen daño a las zonas de cultivo y ponen en peligro a otras especies, como los patos reales, cucharas y porrones. Es una de las especies más invasoras de Europa porque son bonitos y muchos ciudadanos los tienen en casas grandes. Son sedentarios, pero es complicado capturarlos. Aun así, estudian la manera de hacerlo.

Estos gansos no son los blancos que los pacenses alimentan en el parque del río. Estos son domésticos, aunque están asilvestrados y no se consideran una especie invasora. A pesar de ello, son voraces porque están acostumbrados a comer mucho de la mano de los visitantes del parque y quitan comida a otras especies. Ensucian el césped y estropean el parque.

Sus nidos son muy atractivos y sus colores amarillos y negros los hacen candidatos de estar en una jaula en casa. Hasta que el dueño se cansa y lo suelta. Igual ocurre con los picos de coral o los bengalíes rojos. Ahora surcan las márgenes del río y desplazan a los jilgueros, verdecillos, pinzones o colirrojos.

Tragsa recibe el lunes las mantas de fibra de coco con las que Junta probará si puede secar el nenúfar para acabar con los tapices que cubren el río. Cubrirán más de un kilómetro de río en la margen derecha. La jefa del departamento regional de la lucha contra especies invasoras considera que la peor amenaza en el Guadiana llega de la mano del nenúfar y el camalote. Pone al mismo nivel a los peces alóctonos como el black bass o el percasol. Por debajo, irían las tortugas de Florida y las aves.

A María Jesús Palacios le preocupa la expansión del visón americano en la cuenca del Guadiana, «de Ruecas hacia arriba». Procede de escapes de las granjas peleteras que antiguamente había en Castilla y se ha colado a través del Tajo. Han capturado 60 en la zona norte del Guadiana dentro de Extremadura este año, que investigan en un centro del CSIC en Ciudad Real. Entre otros patógenos, buscan el causante de la covid-19. Se han detectado focos en granjas de cría, pero también en algunos silvestres. En Extremadura no se conocen casos y en Badajoz no se han detectado visones americanos.