Investigan si los hombres que irrumpieron armados en una empresa de Badajoz son sicarios buscando un objetivo

Dos sicarios en busca de un objetivo para matarlo, es la posibilidad que se investiga para explicar el peligroso incidente que se vivió en un negocio de venta de coches del polígono El Nevero de Badajoz el jueves pasado. Dos hombres armados irrumpieron en la empresa, preguntaron por una persona y registraron las dependencias. Cuando comprobaron que no estaba, se marcharon.

La Policía Nacional, que se ha encargado de la investigación, solo indica que las indagaciones siguen su curso y que, por el momento, no se han producido detenciones.

Según ha podido saber HOY, una de las hipótesis es que se trate de dos hombres que querían atentar contra la vida de un tercero por una venganza relacionada con un clan de Badajoz. Se trata de un conflicto que ya ha producido enfrentamientos y denuncias legales en la ciudad.

Los investigadores también estudian si este incidente está relacionado con otros hechos violentos como las amenazas y el incendio que se han producido en San Roque en las últimas semanas.

Igualmente en los últimos 14 meses Badajoz ha vivido dos asesinatos a tiros que se creen que han sido ejecutados por asesinos profesionales. En ninguno de los incidentes se ha podido determinar la autoría de los mismos, los casos siguen abiertos.

En el vídeo de seguridad del negocio se aprecia claramente que los dos hombres armados tenían un objetivo claro, de hecho se encontraron con dos personas en la empresa, pero no les causaron daño. Solo les preguntaron, según adelantó HOY, por la persona a la que buscaban.

Los hombres armados llegaron a la empresa de venta de coches, en el polígono El Nevero, en un coche de alta gama. Aparcaron dejando el maletero hacia la entrada del negocio y se bajaron del asiento del conductor y del del copiloto.

Uno de ellos llevaba chaqueta, gorra y gafas de sol. Cuando se tropezó con las dos personas que había en el interior de la nave, sacó una pistola que mantuvo apuntada hacia el suelo salvo en un momento que la levanta y apunta. Este individuo, en todo momento, se queda en la entrada controlando la salida y a los dos hombres que había en el negocio.

El segundo individuo llevaba sombrero, gafas y gabardina. Esta última prenda le sirvió para esconder un arma larga que, igual que su compañero, sacó al cruzarse con las otras personas. En su caso su actitud fue mucho más activa. En el video se aprecia como registra la oficina y todos los rincones de la entrada, luego recorre la nave mirando tras los coches en venta por si había una persona escondida.

Finalmente, tras descartar que la persona que buscan no está, se suben al coche y abandonan la zona.

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