Badajoz

Los hoteleros pacenses piden actividades culturales en verano para atraer turistas

Quieren cambiar el concepto de que Badajoz es un lugar de paso para convertirla en un destino desde donde se puede visitar el resto de la provincia. En julio y agosto, cuando los hoteles se llenan en Mérida por los festivales de teatro y música, pueden ser una alternativa de alojamiento. O también para conocer las piscinas naturales de La Codosera y el entorno. Pero para ello quieren añadir atractivos a la ciudad. Que cuando el turista llegue al hotel encuentre incentivos para conocer Badajoz.

La asociación de hoteleros se reunió la pasada semana con una delegación de concejales, a quienes trasladaron la necesidad de aumentar la colaboración por parte del Ayuntamiento. Entre otras cosas, por ejemplo, que se les incluya en la app para teléfonos móviles que acaba de estrenar la ciudad y en la que se agrupan todos los servicios. Así, un turista l puede saber cómo llegar a su hotel en transporte público. O que cuando alguien busque alojamiento, encuentre la oferta actualizada.

El concejal de Turismo, Rubén Galea, señala que le plantearon la posibilidad de que el Alcazaba Festival se amplíe. Aunque este es de promoción privada y no depende del Consistorio. Este ciclo ya ha anunciado dos espectáculos. El 18 de julio actuará Niña Pastori y el 20 será el turno de El Barrio.

Por otro lado, el Ayuntamiento está mejorando la coordinación de las actividades en fines de semana para que no concurran aquellas que atraen más visitantes. En 2023 coincidió el Mundialito de Fútbol que suele traer a cientos de familias con los niños a jugar; la Feria del Toro y Los Palomos. Esto desbordó los hoteles cuando otros fines de semana del año apenas superan la media del 60%. «Estamos teniendo ocupaciones fuertes en los días de la feria de Olivenza, los Carnavales, en días de oposiciones y San Juan», indica José Luis Iniesta. A pesar de ello muestra su preocupación porque el precio de las habitaciones en Badajoz es más bajo que en otras localidades del entorno.

Los hoteleros llevan tiempo reclamando más coordinación con el Ayuntamiento para que se les traslade un calendario de eventos con el que estar avisados de aquellos días de mayor afluencia turística de la ciudad más allá del Carnaval o Semana Santa.

El Ayuntamiento les ha prometido tenerles informados de las actividades de Ifeba, así como contar con ellos para la próxima edición de Fehispor. La feria hispano portuguesa dará en 2024 importancia al turismo transfronterizo.

Los hoteleros se reunieron con el Ayuntamiento en diciembre y desde entonces han atendido algunas de sus propuestas, dice el concejal Rubén Galea, como que les ha distribuido material promocional turístico para las fiestas grandes de la ciudad.

Otro de los asuntos que trataron los hoteleros a finales de año y, de nuevo esta primavera, es el IBI de los hoteles. Y de momento el Ayuntamiento no lo va a bajar. Es, al menos, lo que se desprende de la reunión entre hoteleros y concejales este mes. Los empresarios reclaman que el Ayuntamiento estudie una reducción del impuesto, que es de 150.000 euros anuales para el Zurbarán y de 65.000 para el Río.

El tributo, explica el empresario José Luis Iniesta, supone unos 7 euros de coste por habitación que se repercute a los clientes. El concejal de Hacienda, Javier Gijón, incide en que el Ayuntamiento realiza estos meses una comparación con otras ciudades extremeñas. Pero este informe no está terminado.

Gijón argumenta que el alto precio se debe al valor catastral y que este no depende del Ayuntamiento, dado que está determinado por Catastro. Pero Badajoz aplica un gravamen a ese valor.

Es del 0,72% para bienes urbanos, aunque se incrementa hasta el 1,1% para aquellos inmuebles cuyo uso sea distinto del residencial y su valor catastral sea mayor o igual a 360.000 euros. Para que se le aplique este tipo incrementado, la propiedad deben encontrarse entre el 10% de mayor valor para su uso.

Por eso, otras fuentes consultadas indican que el tipo incrementado repercute en los hoteles más grandes, que el Ayuntamiento podría modificar la ordenanza fiscal y bajarlo hasta el 0,72 por ciento. Y que los hoteles lo notarían.