Los cuatro colombianos detenidos por el tiroteo de Cáceres han sido liberados y han vuelto a su país
Probaron ante la juez que habían entrado en España en el mes de agosto cuando el suceso fue en julio
La resolución de los tiroteos de Cáceres se complica. A pesar de la detención de doce personas, los identificados como autores de los disparos han ... sido puestos en libertad y han salido de España. Se trata de cuatro ciudadanos colombianos.
Estos cuatro extranjeros fueron detenidos el viernes pasado en una finca de la urbanización Los Rostros de Badajoz. La causa de su arresto es que existe una grabación de una cámara de seguridad del Polígono Ganadero de Cáceres. En la misma se aprecia a varios tiradores. No se les ve la cara porque la llevan cubierta, pero se les escucha hablar y se intuye que la nacionalidad es colombiana por las expresiones que usan.
El martes pasaron a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción número 3 de Cáceres. En su declaración mostraron pruebas de que habían llegado a España en agoto, cuando el tiroteo fue el pasado 14 de julio. Fueron puestos en libertad, aunque deben comparecer en un juzgado los días 1 y 15 de cada mes. Según ha podido saber HOY, pueden cumplir con esta obligación en Colombia, en una juzgado próximo a su ubicación, el que elijan y se han marchado de España en estos días.
Piden el archivo del caso
Del total de las doce personas detenidas, solo cuatro han entrado en prisión provisional comunicada y sin fianza. Dos de ellos están representados por el letrado pacense José Duarte que pide la puesta en libertad de sus representados «y el archivo de la causa».
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Duarte argumenta que las novedades en el periodo de instrucción del caso hacen necesaria la puesta en libertad de sus representados.
El auto de entrada en prisión de los detenidos establece que el pasado 14 de julio, como captó una cámara de seguridad, un Audi negro impactó contra la puerta de una parcela en el Polígono Ganadero de Cáceres y tres hombros, con la cara tapada, se bajaron y comenzaron a disparar. Según ha podido saber HOY en el interior de la finca había alrededor de 15 personas, incluidos niños, pero no hubo heridos.
La grabación también muestra un Porche Cayenne que el auto señala como un vehículo que pudo ser utilizado para facilitar la huida.
A raíz de este tiroteo, la Policía Nacional estableció una vigilancia en dos parcelas de la urbanización Los Rostros de Badajoz. Su hipótesis es que la familia relacionada con estas propiedades, un conocido clan pacense, había atentado contra la vida del líder de otra familia, que también es de la capital pacense pero se refugiaba en Cáceres.
La vigilancia dio sus frutos, según creía la policía, el pasado miércoles 18 de septiembre. Los agentes observaron como uno de los sospechosos entraba en una finca de Los Rostros «donde se ocultan cuatro individuos de nacionalidad colombiana». «Momentos después sale el vehículo (Audi) sustraído desde hace meses en Alhaurín de la Torre (Málaga)». Es decir, los agentes localizaron en una misma ubicación el coche que se usó en el tiroteo, a uno de los sospechosos y a varios ciudadanos de Colombia que podrían ser los autores de los disparos.
Los policías, además, relatan en el auto judicial que vieron como dos de los ciudadanos colombianos llevaban guantes y pistolas y se alejaron de la finca. Posteriormente escucharon detonaciones y volvieron a la parcela de la que habían salido con una bolsa en la mano en la que creen que iban las armas. Según ha podido saber HOY los agentes sospecharon que estaban realizando prácticas de tiro, quizá para un nuevo ataque. Dos días después se realizaron las redadas en Badajoz y se llevaron a cabo las detenciones.
Fue el viernes. Cuatro de los arrestados fueron localizados en el barrio de San Roque y otros siete en dos parcelas de Los Rostros. Además una última persona fue detenida cuando estaba en la puerta de la comisaría interesándose por sus conocidos.
Una larga guerra
Detrás de esta operación policial, según señala el auto del Juzgado de Cáceres, hay una larga guerra entre dos familias de Badajoz.
El primer suceso que se relaciona con este conflicto es un tiroteo en 2019 en Suerte de Saavedra en el que un hombre de 27 perdió el bazo y un riñón. Se trata de la misma persona que sufrió los dos tiroteos de Cáceres en abril y julio, por lo que al menos han tratado de matarlo tres veces.
En el verano de 2020 hubo otra reyerta con disparos en San Roque y en el juicio por estos hechos, en 2023, se produjo una nueva pelea, esta vez con palos y bates de béisbol en los juzgados de Badajoz.
Finalmente la juez cree que su caso también está vinculado a la muerte de J. G. C., el joven de 34 años que fue acribillado en el bar Vaquerizo en febrero mientras desayunaba con su mujer. Temen que los tiroteos en Cáceres fuesen la respuesta a esta asesinato que aún está sin resolver.
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