Uno de cada cinco conductores da positivo en drogas en los controles de la Policía Local de Badajoz

Esta semana el Ayuntamiento de Badajoz ha sacado a concurso la compra de nuevos test de drogas. El Consistorio invertirá 20.000 euros para contar con 'narcotest' durante dos años. Se trata de pruebas que se realizan con una muestra de saliva y que pueden detectar cinco sustancias (cannabis, opiáceos, cocaína, anfetaminas y metanfetaminas, incluidos en MDMA/éxtasis).

La Policía Local utiliza 'narcotest' desde 2015. El año pasado usó más de 300 en dos ámbitos distintos: controles preventivos y otras situaciones (después de accidentes, por síntomas evidentes...).

Hay que diferenciar ambas circunstancias porque en los controles no hay selección de conductores y se trata de unas pruebas aleatorias, es decir, las más fiables a nivel estadístico. En 2024 la Policía Local realizó 165 pruebas en controles y de ellas dieron positivos 34 personas, es decir, un 20,6%, uno de cada cinco. El porcentaje es mayor que el de 2023, cuando fue del 16,6%.

Fuera de los controles se han hecho otras 176 pruebas. En concreto, según indica la policía, estos test se han hecho en siniestro viales, por conducción con síntomas evidentes, por manifestaciones o hechos «que permitan razonablemente presumir que lo hacen bajo la influencia de sustancias» o tras otras infracciones. En este caso los positivos fueron 75, un 42% de las pruebas. No es una estadística tan realista sin embargo porque no se trata de pruebas aleatorias.

El porcentaje de positivos por drogas en controles supone el triple que por alcohol. El 2024 fue el año en el que la Policía Local hizo más controles de los últimos cinco años. En total fueron 119, en los que se sometió a pruebas (todos de alcohol y algunos de ellos de drogas) a 1.909 personas. Dieron positivo en alguna sustancia 123, es decir, un 6,4%. Supone una ligera caída con respecto a los años anteriores.

Cuando la Policía Local coloca un control es mixto; es decir, tanto para alcohol como para drogas. Desde la Jefatura explican que solo se sanciona por una de las posibles infracciones. «El procedimiento habitual consiste en someter al conductor a la prueba de alcohol y, si esta arroja un resultado negativo y el agente de la autoridad observa que puede haber ingerido drogas, a continuación se le somete a la prueba de estupefacientes», explica desde la policía.

Los responsables de la Policía Local pacense también destacan que es muy importante su labor de control «porque la ingesta de alcohol y drogas afecta a las capacidades psicofísicas del conductor y con ello se incrementa el riesgo de que se produzca un siniestro vial». Añaden que uno de los «objetivos principales de la Policía Local de Badajoz es la reducción de la siniestralidad vial en las calles de Badajoz y de la lesividad que lleva aparejada la misma».

En cuanto a las sanciones, depende de las circunstancias esta infracción puede ir desde una multa importante hasta considerarse delito e ir acompañada de una pena de prisión.

Hay que distinguir dos supuestos, según destaca la Policía Local. En el caso de que el conductor dé positivo pero no se aprecien signos externos que hagan presumir que conduce bajo la influencia de las drogas, la ley de tráfico y seguridad vial califica dicha conducta como una infracción muy grave. Lleva aparejada la pérdida de seis puntos del permiso de conducir y una multa de 500 euros.

En el caso de que en el conductor se aprecien signos externos de consumo, el Código Penal lo recoge como delito. En ese caso el artículo 379.2 castiga con pena de prisión de tres a seis meses, con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad. También pierde el derecho a conducir entre uno y cuatro años.

También comete un delito el conductor de un vehículo que, requerido por un agente de la autoridad, se niegue a someterse a las pruebas. La pena es de prisión de seis meses a un año y también se le retira el carné.