Los poblados insisten en tener autobuses los fines de semana y una piscina

Hace siete semanas que HOY está recorriendo los distritos electorales de la ciudad para preguntarle a los vecinos qué le piden al que sea elegido alcalde el próximo 24 de mayo. Hoy es el turno del octavo distrito, una circunscripción muy especial. No es un barrio, sino los ocho poblados. Cada uno tiene sus problemas, pero comparten una serie de reivindicaciones. La principal es tener servicio de autobuses los fines de semana. También solicitan que se construya una piscina en alguna de las pedanías para tener este servicio más cerca.

Los ocho poblados suman 7.901 vecinos. El más grande es Gévora con 2.431. Le siguen Villafranco del Guadiana con 1.571, Valdebótoa con 1.305, Novelda con 923, Sagrajas con 611, Balboa con 478, Alvarado con 325 y Alcazaba con 251.

Estos pacenses llevan años exigiendo contar con un mejor servicio de autobuses, con mayor frecuencia, y critican que carecen de líneas durante el fin de semana. «Los sábados y los domingos son los días libres y es cuando la gente quiere ir a Badajoz», explica Félix Montanet, de la Asociación de Vecinos de Balboa.

Recientemente el Ayuntamiento les ha concedido líneas los primeros domingos de mes, pero los vecinos lo consideran insuficiente. Manuel Palacios, representante vecinal en Alvarado, espera que este servicio se mejore. Explica que sus vecinos tardan una hora en llegar a su poblado en autobús cuando son menos de 20 minutos en coche. Esto se debe a que la mayoría de los buses que tienen hacen paradas en otras pedanías en el trayecto. Además, el último que sale de Badajoz hacia este destino es a las 19.15 horas, por lo que es muy pronto para aprovechar la tarde en la ciudad.

Otra reivindicación conjunta es la piscina. Joaquín Ramos, de la Asociación de Vecinos de Valdebótoa, admite que no es realista pedir esta instalación en cada poblado. «Pero podría haber una en Gévora, que es una promesa hace tiempo, y serviría para los que estamos cerca». Las infraestructuras deportivas, en general, son una carencia en estas zonas. En Valdebótoa, por ejemplo, piden una pista de pádel porque no tienen más servicios de este tipo, ya que su campo de fútbol lleva años abandonado.

Otro problema común son las malas comunicaciones. Hay problemas para sintonizar los televisores, mala cobertura en los móviles y servicios de Internet con poca velocidad.

Más señales de tráfico

En los poblados, además, la señalización vial es escasa. Muchos cruces no tienen ninguna ni hay reductores de velocidad en las calles. «Es la ley del que va a la derecha», bromea Guadalupe González, de la Asociación Juvenil de Villafranco del Guadiana.

Más allá de las demandas conjuntas, cada una de estas pedanías tiene cuentas pendientes con el Ayuntamiento. En el caso de Gévora es la piscina y Alvarado quiere contar con cementerio y ha pedido en numerosas ocasiones al Consistorio que limpie de escombros la alameda que rodea el poblado.

En Valdebótoa quieren que se instalen más contenedores de reciclaje porque solo hay a la entrada y a la salida y proponen que se reutilicen las antiguas viviendas del cuartel de la Guardia Civil que están abandonadas. Joaquín Ramos sugiere, por ejemplo, un centro de día para mayores.

En el caso de Villafranco del Guadiana han solicitado al Consistorio un centro de ocio. El problema, según detalla Guadalupe González, es que no tienen ninguna instalación cubierta, así que cuando llueve deben reunirse bajo un porche.

En Balboa las reivindicaciones tratan de cuestiones se seguridad. Este poblado ha sufrido inundaciones graves varias veces porque el río se desborda. Piden que la rivera se arregle igual que hicieron con los cauces del Rivillas y el Calamón en Badajoz. «Hasta que no haya una tragedia, nada», dice Félix Montanet.

Otro problema aquí es la estrecha carretera con la que cuentan. Montanet denuncia que es peligrosa porque pasan camiones con tomates que ocupan todo el espacio y hay coches que se han salido de la vía.

La obra más importante para los poblados en esta legislatura se está ejecutanto y cuesta 8 millones se euros. Se trata de la adecuación del saneamiento. Consiste en la construcción de cuatro nuevas estaciones depuradoras que darán servicio a Alvarado, Alcazaba, Novelda y Sagrajas, así como de dos impulsiones: de Gévora a la nueva estación de Badajoz y de Balboa a Villafranco.

Se han construido nuevas pistas deportivas en Gévora.

Valdebótoa y Alcazaba han inaugurado parques, en Novelda se han instalado juegos infantiles.

Ha habido varias promociones de viviendas nuevas.

Contar con autobuses a Badajoz todos los días de la semana, ya que actualmente no tienen este servicio los fines de semana.

Una piscina en alguno de los poblados que permita tener este servicio más cerca al resto de pedanías.