«Crear un sello propio aporta un valor añadido a nuestra fruta»

–¿Por qué dio el salto a comercializar directamente su fruta?

–Como agricultores somos conscientes de la situación de la agricultura en nuestra zona. Entre el agricultor y el comprador hay tantos intermediarios que el precio de salida del campo y al que compra el consumidor final están a años luz. Por eso hemos creado nuestra propia marca identificativa y comercializamos directamente con empresas en grandes mercados y otros vendedores de frutas más locales en distintas provincias de todo el país. Aún no vendemos a tiendas o clientes finales, pero estamos en ese proceso, todo llegará.

–¿Qué problemas veía?

–Actualmente parece que solo queremos hablar de vender, márgenes de dinero y negocios, y nos olvidamos de que el campo necesita sostenibilidad, unos tiempos y mucho cariño. Intentamos hacerlo así, pero el mercado tiende a empujarnos a un sistema poco sostenible donde solo cuenta una gran producción. Y nosotros también creemos que esa debe ser una premisa en el campo, porque le da valor a lo que recogemos, y garantizamos dejar a las generaciones futuras una tierra respetada.

–¿Cómo ha creado su sello o marca personal?

–Primero, teniendo claro que nuestros productos son de calidad y que seguimos trabajando por mejorarlos, cumplimos con las legislaciones y tenemos sellos de calidad que lo auditan. Sabemos que sin apostar por nuestra identidad se pierde nuestro valor, e igualmente importante es la sostenibilidad y los productos de proximidad y temporada. Además, si te paras a pensar, nadie sabe de quién es la fruta que está comiendo. A partir de esto, compramos una central frigorífica para mantener nuestros productos y alargar su vida, y no tener que salir corriendo a venderle al primer comprador por miedo a que se pierda la fruta. Luego creamos un nombre y un logo para Arrofrut, y con el sello propio hemos dado un valor añadido a nuestra fruta.

–En el campo ¿qué importancia tiene internet y las redes sociales?

–En nuestro caso, ahora mismo son una de nuestras armas para darnos a conocer. Primero intentamos promocionarnos visitando ferias, asociaciones y clientes en persona, pero para llegar a todos lados, las nuevas tecnologías son indispensables. Hemos creado una página web propia y mantenemos a diario la actividad en las redes sociales. Sabemos que internet es la vía para acercar al agricultor al comprador final, por eso contamos también con personal que se está ocupando de esa parte y nos está dando visibilidad y acercando a nuevos sectores.

–¿De qué manera se puede mejorar la comercialización?

–Vamos a seguir apostando por la sostenibilidad. Para ello estamos probando placas solares y sistemas que permiten mejorar el uso de recursos como el agua, minimizando su consumo. Además, buscamos asesoramiento de especialistas en este tema y vamos moviéndonos en esa dirección. También apostamos por la venta directa desde nuestras instalaciones a las tiendas pequeñas e, incluso, yendo más allá, con venta directa a través de nuestra web, con pedidos realizados 'online'.

–¿Cree que el futuro está en diversificar los cultivos?

–Creemos que la vía no es solo apostar por nuevos productos, sino mejorar los nuestros, apostando por calidad, que sean sanos, sin residuos, y nuestro camino va hacia la sostenibilidad, el cuidado de los recursos y la salud.