Aumenta el gran consumo a pesar de la subida de precios
ANÁLISIS AGRARIO ·
Esta tendencia se consolidará a finales de año fijándose en un 3,7%JUAN QUINTANA
Lunes, 6 de junio 2022, 08:11
El actual contexto político y económico a nivel mundial es complejo, con costes energéticos disparados, una cesta de la compra que crece lo indecible y enormes incertidumbres derivadas, en gran parte, de la crisis ruso-ucraniana. Sin embargo y de acuerdo con los datos presentados por la consultora Nielsen, el gran consumo ha crecido en 2022 un 4,6% hasta abril y se estima que esta tendencia se consolidará a finales de año fijándose en un 3,7%. Una evolución que llama la atención, porque se podría pensar que las inseguridades y las fluctuaciones actuales, junto con la inflación y el alto coste de la energía, cuyo consumo es más inelástico, habrían afectado a la baja a la cesta de la compra. Sin embargo, es cierto que el volumen de ventas sí se ha reducido en un 1,3%, pero el hecho es que los consumidores todavía no han escatimado en el cesta de la compra. Y es llamativo, porque de acuerdo con este mismo informe, la inflación y la subida de precios son las principales preocupaciones de los consumidores; de hecho un 70% se fija más en el precio y las promociones, un 10% más que el pasado año. Esto debería implicar cambios significativos en su comportamiento de compra, pero por el momento no son los esperados.
Esta subida del gran consumo y bajada del volumen de ventas se explica por el incremento de más del 17% en los precios de la industria alimentaria desde abril del pasado año, de acuerdo con el Índice de Precios Industriales (IPRI) publicado la pasada semana por el Instituto Oficial de Estadística (INE). En estos primeros meses de 2022 los que más han aumentado corresponden a los del procesado y conservación de carne, y a la elaboración de productos cárnicos, así como a la fabricación de productos de alimentación animal. Otros como el tomate para industria, tan relevante en Extremadura, se han mantenido estables.
Pero más allá del gasto total, las marcas de distribución se están consolidando cada vez más, habiendo crecido casi el 12% en esta primera parte del año, lo que supone ya un 43% de las compras. Un problema para la industria de marca, que ve cómo el consumidor pierde interés por la innovación, al menos de forma coyuntural.
La inflación y la subida de precios son las principales preocupaciones de los consumidores
En todo caso el crecimiento del gran consumo es sin duda un buen e inesperado síntoma que puede ayudar a frenar la crisis económica, pero que está muy sujeto al control de los costes energéticos que, según afirman los especialistas, se podrían amortiguar en los próximos meses. Lo que sucede es que con la energía ya estamos muy acostumbrados a los repentinos e intensos repuntes de los precios, y a posteriores bajadas, pero sustancialmente menores, con lo que aprovechando las crisis periódicas se consolidan encarecimientos que en la práctica no se revierten. Un ejemplo lo podemos ver en el caso del gasóleo agrícola, que ha llegado a alcanzar un récord histórico de 1,40 euros/litro, a pesar de la bajada del barril Brent a los 95 euros a finales de abril. Una situación anómala si se considera que en marzo el Brent estaba a 106 euros el barril y el precio del gasóleo a 1,18 euros/litro. El hecho es que ahora llenar el depósito de un tractor medio ha pasado de 300 a 1.000 euros anuales que, si bien es cierto no es una cantidad desequilibrante en valor absoluto, es un aumento del más del 300 por ciento, que se une a otros tantos en toda la batería de inputs cuyo coste también se ha disparado. Lejos queda la reciente y controvertida bonificación de 20 céntimos por litro, tan gravosa para las arcas públicas, y tan ineficaz para el usuario.