El Badajoz se apaga

Es curioso, pero el Badajoz escribió ayer el que puede ser el último capítulo de su centenaria historia a escasos metros de donde empezó todo. El reconvertido viejo Vivero aguardaba dos manzanas más abajo noticias de su inseparable compañero desde que en 1909 le abriera por primera vez sus puertas. Hasta allí resonaron los ecos de los lamentos de la veintena de aficionados que decidieron arropar a su club de toda la vida en la agonía que le deparaba en el Juzgado de lo Mercantil número 1 ubicado en la Urbanización Guadiana.

Los representantes de la Agencia Tributaria y la Tesorería de la Seguridad Social alzaron la mano para votar en contra de las dos opciones planteadas en la propuesta de convenio y con ello firmaron la sentencia de muerte del Badajoz. Este rechazo impedía contar con la adhesión del 50 por ciento del crédito ordinario necesario para dar luz verde al plan de viabilidad presentado por el club, por lo que la jueza decretó la disolución del convenio y con ello se inicia el proceso de liquidación. De esta forma, el actual Consejo de Administración cesa en sus funciones y el control de la sociedad pasa al administrador concursal como liquidador.

Los actuales propietarios del Badajoz aseguran que van a seguir luchando para tratar de evitar la disolución de la sociedad, aunque la Ley ya no le permite otra salida que liquidar sus activos. «El proceso de liquidación es inevitable», sentencia Íñigo Landa, copropietario y asesor jurídico de la entidad blanquinegra. La decepción es enorme por el mazazo recibido. «Sientes ese dolor como todo extremeño y todo pacense. La vida no acaba aquí, hay que seguir luchando y trabajando», expone el presidente Carlos Uriarte.

El club se agarra a un hilo de vida, una especie de laguna legal, aunque la jueza precisó que a los acreedores les ampara su derecho de actuar libremente como considerara oportuno. «Hay una cuestión formal en cuanto a la decisión de la Agencia Tributaria y la Tesorería y es que no han hecho hasta el día de hoy ningún tipo de notificación de las razones y motivos por los cuales votan en contra. Ese podría ser un motivo de nulidad de esa decisión, pero es un tema muy jurídico», expone el asesor jurídico, quien sin quitar la mirada a los representantes de Hacienda y Seguridad quiso que así constara en acta una vez que la jueza dio por concluida la junta de acreedores.

Trato discriminatorio

En ese sentido, adelanta que el club va a recurrir la decisión porque ambos organismos no se han pronunciado previamente y rompieron su silencio justo en la votación ni ofrecido la opción de negociar otra alternativa, así como tampoco se había dado la oportunidad a los acreedores minoritarios a defender sus intereses, puesto que ahora se quedan sin cobrar.

Landa entiende que el Badajoz ha recibido un trato discriminatorio con respecto a otros clubes que sacaron a delante su convenio en mejores condiciones y con mayores ingresos, e incluso con aquellos que estando en Segunda B incumplen los plazos pactados. «Lo primero que va a hacer es iniciar el proceso de liquidación porque es lo que marca la Ley. En ese sentido no se puede hacer nada, aunque nosotros presentaremos una serie de alegaciones. Entendemos que es contra derecho porque no han hecho ningún tipo de motivación de las razones, no es un acreedor más. Sobre todo cuando tenemos antecedentes en otros clubes en las que las decisiones han sido distintas con convenios peores al nuestro como es lo que ha pasado con el Celta de Vigo. Están en Primera, han hecho una quita del 85 por ciento y sin embargo ahí la Agencia Tributaria lo validó no llegando a acuerdos con los créditos privilegiados. Aquí con el Badajoz finalmente ha decidido que no era posible llegar a unos acuerdos en función de la categoría deportiva. También sabemos que hay clubes como la Leonesa, que está en Tercera División, está incumpliendo el convenio y sin embargo la Agencia Tributaria tampoco está llevando a liquidación a esos clubes. O situaciones como la Real Sociedad o el Alavés donde la Hacienda Foral ha hecho créditos participativos, ha convertido la deuda en crédito. Hay que seguir siempre unos criterios similares para situaciones similares y en este caso la decisión no ha sido motivada ni justa en comparación con situaciones anteriores», recuerda el copropietario del Badajoz. Esta vía podría sentar un precedente porque ninguna entidad habría planteado una postura parecida. «Es una de las vías que tenemos para intentar revertir esta situación», expone Landa. «La única posibilidad es que el juez acuerde la suspensión del procedimiento mientras se resuelve si esa decisión es nula y tuviera que convocar otra junta de acreedores».

Carlos Uriarte también quiso tranquilizar a los aficionados presentes, que se encendieron y perdieron un poco los nervios al producirse la casual coincidencia de que Miguel Ortega, presidente de la UD Badajoz, acudía al juzgado por motivos de su empresa. El presidente del Badajoz prefirió no entrar a valorar si el club había sido utilizado como cabeza de turco. «No sé si el Badajoz va a ser un chivo expiatorio, pero seguiremos luchando hasta el final».

Los actuales propietarios reconocían la arriesgada apuesta del proceso concursal. «Cuando llegamos se hablaba de una deuda de cinco millones, al final creo que todo el mundo ha conocido dónde está la realidad que no era la que se decía. No había más camino que irse a la Ley Concursal y esa es la opción que tomamos con el riesgo que conlleva. El otro camino era funcionar federativamente y no llevaba a ningún sitio porque todos los años era un montón de intereses que se iban acumulando y en un año, el año pasado o éste el club hubiese tenido que desaparecer». Clubes como Compostela o Real Burgos han resurgido de sus cenizas tras años como entidades 'fantasma'.

El Ayuntamiento, en palabras del concejal de Deportes, mostró su pesar por el rechazo al convenio. Miguel Ángel Rodríguez de la Calle consideraba que «no se ha hecho justicia» y calificó la decisión como un «agravio comparativo» con otros clubes como el Celta, Oviedo o Cultural Leonesa. Incluso De la Calle desveló que desde el Consistorio se realizaron gestiones durante la tarde del lunes con la Delegación de Hacienda en Badajoz para tratar de recabar su apoyo al convenio.