La electrificación para el tren rápido se limitará de Plasencia a Badajoz

En su visita a la región en febrero, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se comprometió a que las obras del tren diésel de altas prestaciones entre Plasencia y Badajoz concluirán en 2019 (con cuatro años de retraso sobre lo previsto) y que un año después se electrificaría el corredor extremeño. También afirmó que para este año se contaría con una dotación de 250 millones de euros.

La comparecencia dejó muchas dudas, entre ellas qué se entiende por corredor extremeño. En el comunicado de este miércoles se indicó que Adif está ya trabajando en los pliegos de la electrificación del tramo Plasencia-Badajoz y en el inicio de la tramitación ambiental necesaria para la misma, «de forma que las obras comenzarán a lo largo del segundo trimestre de 2018 y finalizarán en 2020». Es decir, el organismo dependiente de Fomento pretende realizar en poco más de un año la tramitación ambiental, la convocatoria del concurso y la adjudicación de los trabajos. Pero no dice nada sobre qué pasará entre Madrid y Plasencia.

Menos inversión

No es la única cuestión que queda en entredicho tras el comunicado, que en realidad pretende aclarar las declaraciones que hizo el ministro en el Senado el pasado martes a una pregunta del extremeño Rafael Lemus.

Íñigo de la Serna afirmó que Fomento invertirá en la línea de alta velocidad en Extremadura (de la que forma el tren rápido diésel) 183 millones en 2017 y 143 en 2018. A esto añadió 220 millones para la electrificación, pero sólo habló de estudios en marcha, no de redacción de pliegos. También señaló que las obras de Badajoz a Plasencia terminarán a finales de 2019, tras lo que comenzarán a circular trenes en pruebas.

Esta respuesta generó nuevas dudas, entre ellas del sindicato CC OO, que ha pedido la reunión del Pacto por el Ferrocarril (del que forma parte junto a agentes sociales, partidos políticos y la Junta de Extremadura) ante lo que considera unas previsiones decepcionantes. A su juicio, 326 millones sólo servirán para un tren diésel sin electrificar y de una sola vía en ancho ibérico. En su lugar, reclama electrificar toda la línea de Badajoz a Madrid y que haya doble vía de ancho internacional.

El comunicado de Adif, en el que también habla en nombre del Ministerio de Fomento (aunque en teoría son organismos distintos), intenta aclarar las cifras, pero no indica nada sobre el modelo de tren que se implantará en la región.

Adif señala que la inversión de 183 millones de euros para 2017 sólo es para alta velocidad, que representaba 220 de los 250 que anunció el ministro en febrero. De ese modo, reconoce una reducción de 37 millones sobre lo previsto. Pero afirma que se debe a que se tomaron como referencia los Presupuestos de 2016 y que ahora se han actualizado las necesidades reales a las certificaciones de obra de este año.

En cuanto a la red convencional, indicó que este año se abordarán actuaciones en la línea Mérida-Puertollano, en el tramo Madrid-Plasencia y la renovación de la superestructura Aljucén-Mérida (pendiente desde 2015).