"Dale a un amigo una buena razón para no votar a Podemos"

«Imagina que un amigo tuyo está pensando la posibilidad de votar a Podemos. Aconséjale no hacerlo y dale una razón para ello en no menos de 80 palabras». Éste es el enunciado de una de las preguntas realizadas en el examen de inglés, el pasado 17 de junio en el instituto emeritense Santa Eulalia, con motivo de la convocatoria de los Premios Extraordinarios de Bachillerato.

Podemos es el partido liderado por Pablo Iglesias, que con apenas cuatro meses de recorrido desde su fundación logró obtener cinco eurodiputados en las pasadas elecciones europeas del 25 de mayo. Todos los analistas coinciden en que su irrupción como partido minoritario puede poner en aprietos al bipartidismo que ejercen en España PP y PSOE.

Poner este ejercicio ante los ojos de un estudiante preuniversitario ha levantado una oleada de críticas en todo el país, principalmente en los partidos de izquierda. Pero ayer, hasta la Consejería de Educación y Cultura de la Junta de Extremadura emitió una nota en la que considera que la formulación de esta pregunta es «inapropiada e improcedente». Sin embargo, la consejería considera que una administración no debe fiscalizar de forma preventiva a un docente en la redacción de un examen. Según dice la Junta, «ese control al docente afectaría directamente a la libertad de cátedra que tiene el profesorado».

Quienes redactaron el ejercicio de inglés en este examen propusieron a los estudiantes un texto que reproduce el artículo de Tom Burridge, corresponsal en Madrid de la BBC News, el pasado 26 de mayo titulado Spains We can party proves it can (El partido español Podemos demuestra que sí puede). Sobre ese texto se hacían varias preguntas en inglés, como describir la situación política española, qué debería hacer el nuevo partido político para cambiar realmente la política española o la polémica cuestión de intentar convencer a un amigo de que no votara a Podemos.

«A alguien se le ha ido la olla»

Las reacciones en Extremadura no se han hecho esperar. La portavoz socialista en Extremadura, Isabel Gil Rosiña, calificó ayer de «absoluta barbaridad» este examen y apuntó que la Junta de la comunidad es ahora quien tiene que responder a la negación de un partido político que ha concurrido a las elecciones y que merece todo el respeto.

El coordinador general de IU Extremadura, Pedro Escobar, dijo que va a pedir explicaciones a la Consejería de Educación y Cultura, y espera que el responsable de la misma sea «severamente reprendido».

Escobar se mostró partidario de que los alumnos sean cuestionados sobre asuntos de la actualidad más viva, pero consideró que la forma en la que está formulada la citada pregunta es «absolutamente inadmisible».

«Más allá del favor indirecto que se le puede hacer a Podemos añadió el líder regional de IU a alguien se le ha ido la olla. Le ha salido el subconsciente con una fuerza irrefrenable», señaló ayer Escobar, quien considera que se podría haber abordado este asunto con una cuestión en términos más generales.

Quien se desmarcó de la cuestión fue el Partido Popular, que apeló, igual que la Junta de Extremadura, a la libertad de cátedra. El diputado del PP en la Asamblea de Extremadura, Francisco Ramírez, habló además de la autonomía de los centros. «Nosotros en relación a esa noticia poco tenemos que decir. Yo creo que los centros tienen suficiente autonomía. Hay suficiente garantías como para poder corregir si hay algunas deficiencias», declaró ayer el representante del PP.

Sí entró de lleno a criticar esa parte del examen el sindicato Comisiones Obreras. En un comunicado, la organización sindical considera necesario repetir la prueba de idioma correspondiente a esta convocatoria por sospechas de manipulación ideológica y política, razones por la que deberían invalidar los resultados de esta evaluación.

También se pronunció el sindicato STE en Extremadura, que pide que se anule el examen. A través de una nota, calificó este tipo de preguntas como «completamente improcedentes, tendenciosas y reflejo de una sociedad enferma».

Según STE-Ex, «seguramente mucha gente se ha puesto nerviosa tras las pasadas elecciones europeas», y añadió que es «responsabilidad del Ejecutivo de José Antonio Monago, que seguramente no esperaba tener un resultado tan malo, velar porque esto no ocurra (...). Este examen es una muestra más de una ideología política que se trata de imponer en las aulas por la fuerza».