Matan con un hacha a una trabajadora social de atención a domicilio en Pontevedra

Una mujer de 48 años, natural de Mos (Pontevedra), que trabajaba en el Servizo de Axuda do Fogar (SAF) de O Porriño ha muerto de forma violenta en una de las casas a las que acudía con regularidad en el municipio ubicada en la parroquia de Atios. Fuentes de la CIG informan de que esta misma mañana había denunciado ante el sindicato una situación de acoso en la vivienda, motivo por el que había pedido la renuncia al servicio en la vivienda.

Según ha informado el subdelegado del Gobierno, Abel Losada, efectivos de la Guardia Civil investigan el crimen, cuyo supuesto autor sería un septuagenario que residía en la vivienda, el marido de una mujer que padecía «una enfermedad incapacitante» y que era, según ha precisado el alcalde de O Porriño, Alejandro Lorenzo, a los medios, la que tenía concedida la prestación del SAF.

La anciana, según el regidor, era desplazada a un centro de día de la localidad al que también habría sido trasladada en esta misma jornada. En él permanecerá hasta las 19,30 horas y el Ayuntamiento ha trasladado a sus familiares su disposición a colaborar si es preciso.

El marido de la mujer, supuesto autor del crimen, habría matado a la trabajadora a primera hora de la mañana de este martes con un hacha o un objeto similar con el que le habría dado un fuerte golpe en la cabeza.

En declaraciones a los medios, Losada ha explicado que en el domicilio residía un matrimonio mayor compuesto por una mujer que padece «una enfermedad incapacitante».

También ha ratificado que su marido fue hallado en el lugar, «con manchas de sangre, desorientado y realizando manifestaciones incoherentes».

Asimismo, ha clarificado que la fallecida no figura en la base de datos de Viogen y que, en principio, «no hay ningún indicio que apunte hacia la violencia de género como causa de los hechos».

La víctima aseguró que había explicado a la empresa lo que le había ocurrido el lunes, instándole la compañía a realizar el servicio igualmente, según la mujer relató al sindicato. Desde la CIG le explicaron que tenía que contactar con su delegada sindical para realizar la renuncia al servicio, pero nunca llegó a hablar con dicha delegada, ya que se produjeron los hechos poco después.

Tras el fallecimiento de la mujer, la propia empresa contactó con el sindicato, asegurando que es cierto que la trabajadora les había comentado que este pasado lunes había sufrido una situación de acoso sexual en la vivienda donde finalmente falleció de forma violenta, según trasladan fuentes de la CIG. «Es hora de que las denuncias y las palabras de las mujeres valgan para algo», han reprochado desde la organización sindical, lamentando la «precaria» situación de estas trabajadoras y criticando que, en ocasiones, cuando una empleada renuncia al servicio, «mandan a otra mujer sin comunicarle lo que allí le ocurrió a su compañera».

La Guardia Civil, a la espera de los resultados de la autopsia, ya ha realizado la comprobación de la escena e instruye las diligencias para el completo esclarecimiento de los hechos.

Fuentes consultadas por Europa Press han indicado que ha sido detenido e ingresado en un centro médico. A preguntas de los medios sobre si hay constancia de que el hombre padeciese algún problema neurodegenerativo, el alcalde ha indicado que podía haber algún comentario, pero no tiene constancia de una enfermedad concreta.

El regidor ha explicado que este martes a las 20,00 horas habrá una concentración con un minuto de silencio, en el que también habrá representación del Ayuntamiento de Mos, de donde procedía la víctima, aunque llevaba «años» empadronada en O Porriño.

Asimismo, ha trasladado el pésame a la familia y allegados de la trabajadora y ha asegurado que no tenía conocimiento de ninguna «situación irregular» o problema en relación a la atención en el domicilio en el que, «sobre las 9,00 horas» de este martes, una familiar del matrimonio dio la voz de alerta de la muerte violenta de la trabajadora.

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