Denuncian una «nueva y brutal» agresión a un vigilante en el centro de menores de Trujillo

El responsable de Seguridad Privada del mencionado sindicato, Carlos Jesús Peguero, explica a HOY que la víctima de agresión medió en una discusión entre el interno y un trabajador del centro y cuando se dirigía con el agresor, al girarse le agarraron la mano y se la retorcieron hasta que consiguió tirarle al suelo donde recibió varios golpes. «Ha sufrido una luxación en la mano izquierda», lamenta.

«Es solo el último de una serie de ataques que evidencian la peligrosa situación a la que están expuestos los trabajadores de este centro», continúa el comunicado de CC OO. «Existe una preocupante situación de indefensión ante estos actos violentos», critica.

Se da la circunstancia de que este mismo trabajador ya sufrió otra agresión en enero de 2023 y se había reincorporado al centro hace tan solo seis meses. En aquella ocasión fueron atacados, además del guardia de seguridad, otros dos trabajadores más del centro. Según Peguero en ese incidente «se utilizaron piedras y barras de hierro».

Con todo esto CC OO del Hábitat de Extremadura reclama, a través de nota de prensa, «más recursos y medidas de protección» para toda la plantilla del centro«.

Y es que, según sostiene el sindicato, «se encuentran desprotegidos y carentes de los recursos necesarios para el adecuado ejercicio de sus funciones y salvaguardar su integridad física y en consecuencia la de los propios usuarios del centro».

Los representantes de los trabajadores han querido mostrar su condena «enérgica por la inacción de la Junta de Extremadura», responsable de estos centros, que «continúa desoyendo las reiteradas peticiones de refuerzo en la seguridad por parte del sindicato», lamenta.

Explica el sindicato que la Junta, responsable directa según la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, ha «incumplido su obligación de proteger a sus trabajadores, internos y personal externo del centro», permitiendo que «se perpetúe un entorno laboral inseguro y hostil».

Peguero, aclara que la situación de los vigilantes de seguridad en el Centro de Menores Francisco Pizarro «es insostenible», ya que la «falta de personal y de equipos de protección adecuados está poniendo en riesgo constante la integridad de los profesionales», asegura.

A juicio de Peguero, «es inadmisible que haya un solo vigilante por turno, especialmente en las horas de máxima conflictividad, como las tardes y noches», por lo que considera «imperativo que se refuerce la seguridad con al menos dos vigilantes en esos turnos para garantizar una respuesta efectiva ante cualquier incidente».

A pesar de las múltiples denuncias y llamadas de atención por parte de CC OO, la Junta de Extremadura ha hecho caso omiso a las demandas del sindicato, perpetuando con su negligencia el riesgo tanto al personal, así como a los menores internos.

Según asegura, la «falta de acción» del Ejecutivo regional, «no solo viola la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, sino que también demuestra una preocupante indiferencia hacia la seguridad y bienestar de las personas bajo su responsabilidad».

CC OO reitera su petición a la Junta de Extremadura de «una actuación inmediata y contundente para incrementar las medidas de protección del personal de seguridad», lo cual incluye «un aumento significativo del personal de seguridad y la dotación de equipos de protección adecuados para prevenir futuras agresiones», y muestra su solidaridad con el trabajador herido.