Suceso en Extremadura
La Guardia Civil socorre en un área de descanso de la A-5 a un conductor desorientadoPretendía continuar el camino pese a tener una rueda del vehículo reventada
La Guardia Civil socorrió el martes a un hombre en una estación de servicio de la autovía A-5. Durante esa tarde, el 112 Extremeadura ... movilizó a una unidad de seguridad ciudadana del Instituto Armado de Badajoz hasta una estación de servicio ubicada en las inmediaciones de la mencionada vía alertando de que había un hombre que «no se encontraba anímicamente ni psicológicamente bien en el área de servicio del kilómetro 396 de la A-5, salida hacia Almendralejo», relatan a HOY testigos presenciales.
Tras hablar con el conductor, los agentes requirieron la presencia de compañeros pertenecientes al Subsector de Tráfico de Badajoz, ya que parecía ir bajo los efectos del alcohol. Tras oponerse en un primer momento a realizar el test de alcoholemia, finalmente accedió y arrojó 0.0 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
Rueda reventada
Algunos de los viajeros que se encontraban en la gasolinera cuentan que antes de llegar la Guardia Civil había destrozado una de las ruedas del vehículo, marca Dacia, al impactar contra un bordillo de la estación de servicio y que pretendía continuar el viaje con el coche.
Los agentes consiguieron comunicarse con el conductor pese a que no hablaba castellano, al ser de origen francés con residencia habitual en Marruecos. En ese momento se encontraba desorientado y debió confundirse en la A-66 en Mérida, ya que regresaba de Francia y se dirigía hacia Algeciras para coger el ferry y llegar a Marruecos. Sin embargo, acabó cerca de Badajoz.
Los agentes no vieron claro que pudiese continuar el trayecto y decidieron contactar con el Servicio Extremeño de Salud para que lo examinara. Minutos más tarde, llegó a la gasolinera una ambulancia del centro médico de Talavera la Real que decidió trasladarlo hasta el Hospital Universitario de Badajoz para una mejor valoración.
Llamada de la mujer
El conductor desorientado rechazó el traslado y el ingreso hospitalario, por lo que se activó el protocolo de traslado involuntario que, finalmente, no tuvo que llevarse a cabo después de localizar vía telefónica con a su mujer, que lo convenció para que fuera hasta el centro hospitalario y lo examinaran.
Su coche se encontraba aún este jueves aparcado en la estación de servicio situada en el kilómetro 396 de la autovía Madrid-Lisboa.
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