'El Redoble', himno del pueblo
La conocida jota será la canción oficial de la ciudad a falta de fijar algunos detalles de la letra que la hacen exclusiva de Cáceres
Todos los partidos políticos parecen estar de acuerdo en que 'El Redoble' se convierta en el himno oficial de Cáceres y así lo manifestaron en ... el pleno del pasado jueves, que aprobó iniciar los tramites para hacerlo realidad. A algunos, como el PP o Unidas Podemos, no les han gustado las formas, mediante una moción de alcaldía en lugar de por consenso de todos los grupos, y otros, en especial la única concejala que le queda a Ciudadanos, han advertido de errores históricos en la letra propuesta, pero a fin de cuentas nadie ha expresado reparos serios a lo que, según argumentan, no es más que convertir en oficial un himno que los cacereños han hecho suyo desde hace mucho tiempo de manera oficiosa. Ahora comienza un procedimiento en el que, según se dio a entender en el pleno, se consultará a musicólogos y folcloristas para que la letra que finalmente se apruebe sea lo más fiel posible a la original de una jota que tiene varios siglos de antigüedad y que el uso popular, como pasa con tantas otras canciones, ha ido modificando a lo largo del tiempo.
El asunto de la letra tiene su importancia porque es precisamente lo que justifica convertir 'El Redoble', que se canta y baila por toda Extremadura y también en otros territorios, en el himno de Cáceres. Aseguran los promotores de la iniciativa que la música de esta conocida jota es la misma en todas partes, pero la letra es genuinamente cacereña. Aunque a oídos actuales chirríe un poco tanta referencia a las señoritas, a cómo y con qué se lavan según su procedencia y a cuánto le gustan al autor las mujeres de esta ciudad, al fin y al cabo todo eso se puede considerar metafórico y habría que ser muy aguafiestas para poner el foco en semejantes minucias en lugar de reconocer con el pecho por delante que 'El Redoble' es el himno del pueblo, el que se canta en los eventos populares y cuando ganan los equipos deportivos cacereños, y como tal va a ser oficializado por el Ayuntamiento, que por otra parte ya lo venía utilizando habitualmente en todo tipo de actos.
Y como el pueblo es soberano –para estas cosas, para otras cuesta más–, a los gobernantes no les queda otra que tomar lo que lleva siglos en la calle, envolverlo en papel timbrado y publicarlo en el Boletín Oficial de la Provincia. Ojo, sin apropiárselo, como advirtió en el pleno la portavoz de Unidas Podemos al sacar a relucir el decreto regional que regula estas cosas y en el que se dice que nadie puede usar un símbolo oficial sin el permiso de la administración que lo tiene registrado, una restricción que de todas formas suena a la típica normativa absurda que nadie cumple ni hace cumplir.
Por lo tanto la pequeña polémica que surgió en el pleno del jueves tiene visos de no traspasar las puertas del ayuntamiento, y por lo tanto 'El Redoble' quedará plasmado negro sobre blanco como el himno oficial y definitivo de la ciudad de Cáceres una vez, eso sí, que los expertos nos aclaren si las que se lavaban con aguardiente eran las de la calle Caleros o las del Caminito Llano.
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