La orografía de las Vegas Bajas permite las riadas aunque haya presas
En las Villuercas llueve mucho más, pero al ser el terreno más abrupto es más complicado que el agua cause problemas
El Guadiana es el río más represado de la península, con 38 embalses, 23 de ellos en Extremadura con una capacidad de 8.122 ... hectómetros cúbicos, que supone el 85% del total de la capacidad embalsable.
El Guadiana, como se sabe, pasa por tres comunidades y seis provincias en total. Donde más agua contienen sus presas es en la provincia de Badajoz, que además tiene los seis pantanos más grandes de toda la cuenca (por este orden, La Serena, Cijara, Alange, Orellana, García de Sola y Zújar).
Si tan controlada se supone que está el agua en el tramo pacense, ¿por qué se producen inundaciones en cuanto se encadenan varios días seguidos de lluvias?
Álvaro Paniagua, jefe del Área de Explotación de la CHG y encargado de la gestión de todas las presas de la cuenca lo atribuye a la orografía. Según dice, en las Vegas Bajas el propio nombre indica cómo es el terreno y en cuanto un río crece enseguida se desborda. Algo parecido ocurre en Los Llanos de Cáceres. En cualquier caso, que un arroyo, río o ribera no tenga por encima una presa deja todo el terreno que hay por debajo indefenso ante avenidas extraordinarias.
Las Villuercas es en cambio la zona que registra de media más precipitaciones en la región. Pero allí el terreno es más abrupto –prosigue Paniagua– y los pueblos están en alto respecto a los cauces de los ríos, de ahí que sea más complicado que suba el agua tanto como para afectar bienes y personas.
Con todo, pone de ejemplo el Ebro como una cuenca que da más problemas de inundaciones. No solo porque en el norte hay más precipitaciones sino por las aportaciones que recibe además de los Pirineos y porque no hay tantas presas como en la cuenca del Guadiana, muchas de las cuales ayudan a salvar situaciones comprometidas recogiendo agua.
«Gévora se inundó el martes por el río Gévora, al que va a parar el río Zapatón, que tiene por encima la presa de Villar del Rey. Si esta no existiera, el martes las inundaciones hubieran sido el doble», señala.
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