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«El escenario es mucho mejor que el de ayer y anteayer». Lo ha dicho esta mediodía el presidente de la Junta, al dar el parte de situación del incendio forestal que desde el anochecer del miércoles castiga Las Hurdes y Sierra de Gata. Guillermo Fernández Vara ha explicado este sábado que la mejoría se debe a que han cambiado las condiciones meteorológicas. La principal de esas novedades en positivo es que hace menos viento que ayer y sobre todo el jueves.
La velocidad media en la estación de Torrecilla de los Ángeles, detalla la Agencia Estatal de Meteorología, es de unos 15 kilómetros por hora, y las rachas máximas rondan los 40 kilómetros por hora. Ayer y anteayer llegaron a registrarse picos de hasta 60 kilómetros por hora, y lo que es peor, la media fue más alta, con un viento persistentemente fuerte y de dirección variable, que empujó las llamas hacia diferentes frentes. Además, «la humedad está subiendo y la temperatura bajando», concretó el máximo responsable del Gobierno regional en su comparecencia en el COR (Centro Operativo Regional) del plan Infoex en Cáceres. Otro punto a favor es que las previsiones meteorológicos para la zona afectada contemplan lluvia para este domingo y también para el lunes.
«Hay un punto caliente que preocupa mucho y es Ovejuela, donde se ha saltado del perímetro y estamos combatiéndolo en la confianza de retenerlo en un cortafuego», explicó este mediodía el presidente de la Junta, que detalló que una de las grandes dificultades de la pelea en ese frente estriba en la orografía. «Es una zona de cañones, encajonada, y que tiene mucho combustible», detalló Vara. Se trata de un paraje próximo al conocido como Chorritero o Chorrituelo de Ovejuela.
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En cuanto al resto del incendio, «se ha ido quemando dentro del perímetro», explicó el presidente de la Junta, que añadió que «ni los más viejos del lugar recuerdan que se quemaran tantas hectáreas en un día, y la explicación está en unas condiciones meteorológicas catastróficas». «Esperamos que a lo largo del fin de semana, el fuego se pueda perimetrar (que ningún frente avance más allá de los límites actuales y lo que arda lo que haga dentro de ellos)», confió Fernández Vara, que concluyó su intervención afirmando que «indiscutiblemente, la situación es mejor que la de ayer, aunque sigue sin ser buena».
Guillermo Fernández Vara
Presidente de la Junta de Extremadura
Esta ventana de oportunidad que la meteorología ha concedida y que se extenderá durante lo que queda de día y también mañana llega después de que las llamas hayan arrasado 11.934 hectáreas. Es la estimación de Copernicus, la herramienta de observación de la Tierra del programa espacial de la Unión Europea. Es una cifra estimatoria y en revisión porque el incendio sigue activo, pero procedente de una fuente oficial que figura entre las múltiples herramientas que los servicios de extinción de incendios de los países comunitarios utilizan para analizar la evolución de los fuegos y diseñar sus estrategias de ataque.
El mapa elaborado por este recurso adscrito al Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales muestra una extensa área quemada entre las dos comarcas cacereñas, aunque con varias islas de vegetación sin quemar en su interior. Algunas de esas manchas que en el momento de la imagen se había salvado coinciden con parajes donde en lugar de masas arbóreas de gran continuidad hay parcelas con aprovechamientos agrícolas o ganaderos.
La Junta de Extremadura mantiene el nivel 2 de peligrosidad, que es el procedente ante fuegos que no se pueden atajar solo con los medios del Infoex, el plan regional contra este tipo de siniestros.
Con los primeros rayos de luz, se han ido incorporando este sábado los medios aéreos para continuar con las labores de extinción. El operativo completo que trabaja sobre el terreno bajo la coordinación de los técnicos del Plan Infoex está formado por 24 unidades de tierra, diez maquinarias pesadas y 19 medios aéreos. Al operativo se han sumado medios del Estado, la Unidad Militar de Emergencias, los gobiernos autonómicos de Castilla La Mancha, Castilla y León, Madrid y Andalucía, y también de Portugal. También participan los servicios de bomberos de las diputaciones provinciales de Cáceres y Badajoz, y Cruz Roja, además de la Guardia Civil.
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