Los enfermeros lanzan una campaña para que haya uno en cada colegio

En esta ocasión es Satse, el sindicato de Enfermería, el que ha puesto en marcha un plan de recogida de firmas en las puertas de los colegios. Esta semana han estado en el centro Guadiana de Badajoz, pero antes ya han pasado por el Luis de Morales de la capital pacense, el Juan XXIII de Zafra, el Zurbarán de Coria y el Suárez Somontes de Llerena. El 3 de junio estarán en el Ciudad de Mérida de la capital autonómica.

La campaña se denomina 'Enfermera escolar es conciliación familiar' y con ella quieren trasladar «la importancia de la implantación de esta profesional en todos los centros educativos y de su impacto positivo en la vida familiar».

Según indica Elena Martín, secretaria general del sindicato Satse en Extremadura, «muchas tienen hijos con problemas de salud crónicos y viven su día a día con la intranquilidad de no tener asegurada la atención de sus pequeños durante el horario escolar».

Pone como ejemplo el colegio en el que precisamente han estado esta semana recogiendo firmas. «Es muy importante implantar la enfermera escolar en todos los centros educativos. Y más en colegios como el Guadiana de Badajoz, que cuenta con varios alumnos escolarizados con problemas y necesidades especiales», afirma Martín, que insta a la Junta de Extremadura a poner en marcha esta medida en todos los colegios e institutos de la región.

Hay que matizar que Extremadura cuenta con enfermeros en los centros que tienen escolarizados a niños con enfermedades severas, una medida que empezó a implantarse en 2016 gracias a un protocolo de colaboración firmado entre el SES y Educación.

Hasta ese año, la Consejería de Educación venía contratando temporalmente a personal de Enfermería que cubría necesidades puntuales. Sin embargo, esta modalidad contractual presentaba dificultades para una prestación sanitaria durante todo el curso escolar.

En los últimos años esta figura se ha ido implantando cada curso en más centros. En 2016 solo había cinco que contaban con este personal y en 2025 son 26, según indica la Consejería de Educación. Para ello han destinado un presupuesto de más de 766.000 euros. «Todos los alumnos que lo requieren cuentan con este recurso con el que la Junta de Extremadura garantiza su derecho a la educación», asegura la Junta.

Sus cifras también las recoge el Observatorio Nacional de Enfermería Escolar, un órgano creado en 2020 que reúne a sociedades científicas, representantes de universidades, miembros de colegios profesionales y asociaciones de pacientes, padres y madres.

Eso supone que en Extremadura hay una ratio de 6.417 alumnos por enfermera escolar, un dato que sitúa a la región por encima de la media nacional (una por cada 6.368 alumnos) y como el quinto territorio con una mayor implantación de esta figura en los colegios. Por delante está la Comunidad de Madrid, con 1.200 escolares por enfermera; Ceuta y Melilla, con una ratio de entre mil y 1.200, y La Rioja con 2.201.

En el otro extremo se encuentra el País Vasco, que cuenta con diez enfermeras para 363.716 alumnos, lo que supone una ratio de 36.372 escolares por sanitario.

En otras comunidades como Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Murcia simplemente hacen refuerzos puntuales en los colegios con profesionales que trabajan en Atención Primaria.

Para los sindicatos y organizaciones de pacientes, aunque Extremadura no se sitúa en una mala posición si se compara con el resto de comunidades autónomas, es insuficiente. De hecho, el pasado mes de abril, Satse envió un escrito dirigido a la Consejería de Salud reclamando soluciones a los principales problemas que atraviesan los enfermeros y fisioterapeutas de la región y, entre ellos, solicitaba el «desarrollo e implantación de la enfermera escolar en Extremadura».

A nivel estatal, la Plataforma de Organizaciones de Pacientes ya ha reivindicado que incluyan a estos profesionales en todos los colegios públicos de Educación Infantil, Primaria y Secundaria.

Considera que el motivo principal por el que las consejerías no generalizan la figura de la enfermera escolar en los centros es meramente económica, «cuando solo tendría un coste estimado de 16 a 20 euros al año por habitante».