Sánchez llama en Badajoz a la participación el 10N para evitar el bloqueo político
El candidato socialista resumió sus logros en quince meses y atacó a la derecha que dijo representan Vox, Cs y PP
El PSOE extremeño se conjuró este martes alrededor de Pedro Sánchez, que dio un mitin de campaña en Badajoz, para llamar a la participación electoral el próximo domingo. Solo de este modo, insistió el presidente en funciones y candidato socialista, se podrá desbloquear el país políticamente y las derechas quedarán arrinconadas para permitirle aplicar de lleno su programa social. «Tras el 28 de abril quedó claro que no es suficiente ganar», comenzó diciendo antes de recordar cómo en Francia los liberales han aislado a la derecha más radical «mientras en aquí PP, Ciudadanos y Vox han unido su destino a la ultraderecha (Vox)».
Como el pasado 24 de abril, cuando Sánchez habló en Badajoz justo el día después del debate televisado entre él y sus adversarios, Sánchez se arropó en Extremadura, una comunidad que vota PSOE mayoritariamente y que reunió a más de 1.200 seguidores a las cinco de la tarde en el Palacio de Congresos Manuel Rojas, antiguo alcalde socialista ya fallecido. Este recinto, como se sabe, reemplazó a una plaza de toros que fue escenario de una matanza en la Guerra Civil cuando las tropas de Franco tomaron la ciudad, tal y como se recordó en las intervenciones anteriores para señalar la amenaza que para el PSOE representa la ultraderecha y los partidos que se han aliado con ella para gobernar otras instituciones.
No pactará con el PP
Sánchez alternó entre arremetidas contra PP, Ciudadanos y Vox que, según él, prefieren bloquear políticamente el país, y sus logros al frente del Gobierno de España, un periodo que ya alcanza 15 meses de equilibrismo parlamentario y una tensión creciente debido al desafío independentista. De nuevo, evitó aquellos temas delicados que periodistas y adversarios quieren ponerle delante, como su posición ambigua ante la situación de Cataluña o la política de pactos con la que especulan sus contrincantes a diario. Sobre esto último negó que el Partido Popular se pueda convertir en su aliado si no logra mayoría absoluta el 10N, tal y como indican todos los sondeos.
Sánchez basó su discurso en subrayar lo conseguido, según él, «un proyecto político basado en la justicia social, la convivencia y la limpieza, ¿Cuál es el de los demás? Frenar al partido socialista».
También explicó que pese a las dificultades para gobernar que ha encontrado tras su llegada al poder, incluso con unos presupuestos del PP prorrogados, él ha conseguido subir el salario mínimo interprofesional, luchar contra la explotación laboral, impulsar el pacto de Estado contra la violencia de género o revertir los recortes educativos con 15.000 becarios más que el curso anterior.
Para resumir lo que ha significado el PSOE en España dijo que «hoy existe un estado de autonomías que reconoce la diversidad y pluralidad territorial», señaló este martes al recordar la España centralizada de hace 44 años, cuando las mujeres pedían permiso a sus maridos para abrir una cuenta bancaria o el país vivía aislado internacionalmente, no como ahora con el socialista José Borrell al frente de la política exterior de la Unión Europea. La reciente exhumación «del dictador» la calificó como «una gran victoria de la democracia» y aseguró que un rato antes una compañera del partido le dio las gracias en nombre de su abuela.
Quince minutos y veinte segundos duró la intervención de Sánchez. El candidato socialista venía de dar otro mitin en Valladolid y después se dirigió a Gijón para hacer lo mismo.
Vara analizó el debate de la víspera en clave de western
El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, vaticinó que el PSOE aumentará sus cinco escaños de los diez que se reparten en Extremadura e insistió en la importancia de ir a votar este 10 de noviembre. Pero lo que más interés despertó fue su análisis del debate televisado de la víspera. Vara adjudicó un western a cada participante. Si a Pedro Sánchez le tocó 'Solo ante el peligro', a Casado (PP) y Rivera les adjudicó el título 'Dos hombres y un destino'. A Abascal, por su obsesión de ilegalizar partidos lo relacionó con 'El hombre que mató a Libery Valance'. Por último la película de Iglesias fue 'Le llamaban Trinidad'.
Antes que él habló el secretario general del PSOE de Badajoz, Ricardo Cabezas, que abrió el acto y recordó que su partido fue el más votado en Badajoz, pero las derechas se aliaron para no dejarle gobernar la ciudad, advirtió para movilizar a los votantes este domingo. Los siguiente en intervenir, también brevemente, fueron Maribel García, exconcejala pacense y número dos al Congreso por Badajoz, y Valentín García, exdiputado autonómico y número uno al Congreso por esta misma circunscripción.
