El Coria se encomienda a una carambola en el cierre de la liga

El Coria se juega este domingo algo más que tres puntos en la última jornada de liga. En realidad, se aferra a una combinación casi utópica de resultados para alcanzar alguno de sus dos grandes objetivos: el playoff de ascenso a Primera RFEF o el billete para la Copa del Rey de la próxima temporada. Todo debe empezar con una victoria en el campo del Unión Adarve, ya descendido matemáticamente.

El equipo celeste llega a la jornada final en séptima posición y a tres puntos del quinto clasificado, el último que da acceso al playoff. Para meterse en esa fase de ascenso, además de ganar su partido, necesita que pierdan tanto el Rayo Majadahonda como el Navalcarnero. Ambos juegan a domicilio contra rivales que ya no se juegan nada: el Tenerife B y el Sanse, respectivamente. Si la lucha es por la Copa del Rey, algo más accesible, al Coria le vale que pierda el Navalcarnero o que el Rayo Majadahonda no pase del empate.

Pero los de Rai Rosa no lo tendrán nada fácil, ni siquiera en su partido. El técnico avisa del peligro del Unión Adarve pese a su reciente descenso. «Va a ser un partido muy complicado, en césped artificial, contra un rival que competirá hasta el final y querrá despedirse con una victoria ante su afición», explica el entrenador.

Además, el Coria acude a Madrid con importantes bajas: no estarán Juanjo Rubio por lesión, ni Samu Manchón y Gonzalo Llerena, ambos sancionados por acumulación de tarjetas. Tampoco viaja Piochi, que cumple su segundo partido de sanción. La nota positiva es el regreso de Iñaki León.

Rai Rosa se muestra realista, pero ambicioso. «Tenemos que ir a ganar porque aunque sean mínimas, hay opciones, y si no ganamos y luego los otros dos pierden, la cara de tontos sería grande», asegura.

Más allá del resultado final, el técnico valora la temporada con una doble lectura: «Hay que ponerle un sobresaliente por llegar con opciones hasta el final, pero también somos ambiciosos y creo que hemos tenido en nuestra mano meternos ya antes». Según Rai, la clave de no haber sellado antes esa clasificación ha estado en los tres últimos partidos en casa: «Contra Melilla, Talavera y Sanse merecimos más. Hemos tirado más de 50 veces entre los tres partidos y no hemos tenido la efectividad que necesitábamos».

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