El Cacereño ganó y pudo golear en el Nuevo Matapiñonera

El choque comenzó con un Sanse dominador, aunque la primera ocasión fue de Sancho que, galopando al espacio, pudo disparar tras una tremenda carrera previa de Merencio, que le dejó en situación de mano a mano. Otra situación de peligro que no se concretó con disparo a puerta, también de Merencio, dejó entrever que la escuadra de Julio Cobos podía ser un peligro con espacios por delante.

Aunque quien de verdad atacó bien el hueco fue Tito, que le ganó la partida a Adri Pérez en un córner botado al segundo palo para fusilar a Diego Nieves e inaugurar el marcador en el Nuevo Matapiñonera. La grada verdiblanca lo recibió como un jarro de agua fría, aunque en el momento de tensión tomó el balón Crespo, puso un balón largo a la espalda de Pol Bassa que encontró a Sancho y cuyo pase de la muerte fue definido por Palacín para igualar el marcador.

El partido no tuvo un ritmo excesivamente acelerado en la construcción, si bien es cierto que ambos conjuntos demostraron tener bastante precisión en los metros finales. El equipo dirigido por Manolo Sanlúcar siguió en su idea de adelantar líneas para presionar. Esta situación generó que el conjunto de Cobos encontrara espacios con tremenda facilidad. Clausí estuvo a punto de rematar una asistencia de Merencio, que lleva una segunda vuelta superlativa, aunque no alcanzó a rematar a pesar de lanzarse con todo.

Sancho la volvió a tener tras otra descarga de Palacín y otro centro llovido de Merencio. El equipo cacereño perdonó cuatro ocasiones claras de peligro y, cuando todo se encaminaba a un descanso con empate, Clausí aprovechó un balón peinado para plantarse en situación de mano a mano ante Lejárraga y poner en ventaja al conjunto extremeño minutos antes de encarar el túnel de vestuarios.

Merencio volvió a aparecer nada más arrancar el segundo periodo para encontrar a Adri Pérez en área rival. El media punta remató fuera y en posición de fuera de juego. El cuadro sansero acusó el atrevido planteamiento y en 50 minutos tuvo el elenco de Cobos cinco ocasiones claras, aunque solo consiguió materializar dos.

Tras este arreón, el Sanse lo intentó a través de Gandoy, que tuvo una jugada de peligro que San Vicente despejó a córner en última instancia. Sancho respondió con un peligroso contragolpe en el que no consiguió levantar la cabeza para poder continuar la jugada. Cobos se frustró en la zona de técnicos pensando, probablemente, que la precisión en el último pase fue lo que separó a su equipo de golear al Sanse.

El Sanse monopolizó el esférico con la entrada de Mario al campo y el Cacereño fue obligado a replegar. En la primera salida, la escuadra dirigida por Cobos combinó por más de un minuto hasta que Merencio tuvo hueco para chutar y poner el balón en el larguero.

Pol Bassa puso a prueba a Diego Nieves con un potente disparo que el guardameta despejó tras una gran intervención. La escuadra madrileña apretó y consiguió dominar, aunque el Cacereño, como siempre, encontró espacios con demasiada facilidad. Isaac encontró a Adri Pérez en el área rival, aunque la jugada acabó en córner. En ese saque de esquina, Pepe Bernal puso un caramelo que San Vicente remató para doblar la ventaja.

Mario encontró a Edu Viaña, que entró al área como una exhalación, dentro del área, aunque su disparo fue despejado a córner tras otra magnífica intervención de Diego Nieves. El partido llegó a su final con un Sanse que lo intentó con más voluntad que precisión.