El Romano celebra el «sí» de Beneit

De hecho, hasta Fran Beltrán, que no tuiteaba desde el día de su presentación como nuevo técnico, le ha dedicado un tuit al todocampista gaditano: «No hay mejor manera de empezar la semana». Beneit se fue de vacaciones con la oferta de renovación del Mérida encima de la mesa. Y desde ese mismo día, las oficinas del Romano confiaban en el «sí» del gaditano, aunque los días pasasen y pasasen. «Tranquilos, Raúl se va a quedar», se decían unos a otros. Porque Raúl, tan introvertido él, utiliza sus desconexiones para descansar. Pero fue volver de vacaciones, conectarse de nuevo y darle una respuesta a la dirección deportiva emeritense un día después de regresar a España.

Él se siente valorado en Mérida, muy apreciado por club y afición, y eso ha sido el mayor motivo para querer quedarse por tercer año consecutivo en el Romano. Porque tras un primer curso dubitativo, donde rindió más de lateral derecho que en la medular, la temporada pasada se destapó por completo con Sergi Guilló.

En cualquier posición del centro del campo pero, sobre todo, cuando se acercó lo máximo posible a área rival. No tenía una demarcación fija, pero estaba en todos los frentes de ataque a la vez. Y desde ahí, dibujó siete goles y dos asistencias en 32 partidos (27 como titular). Un año antes, más o menos con las mismas cifras de partidos, quedó su marcador a cero, cuando venía de celebrar seis tantos en Unionistas.

Dentro del vestuario, Beneit es un tipo callado, muy discreto, que pretende más pasar desapercibidos que liderar, bajo un rol secundario. Pero dentro del terreno de juego, el todocampista gaditano se ha convertido en un jugador franquicia del nuevo Mérida. Porque puede jugar en el inicio de la jugada, en la sala de máquinas, en una banda o pegado al punta.

Y eso, para la ideología de Fran Beltrán (como para la de Guilló) es oro puro. De ahí que su celebración sea tan deseada. No porque, hasta el momento, sea uno de los pocos que se quedan… sino por lo que significa su confianza en el proyecto. Y ahora, si Palomares dijera que sí… la política de renovaciones del club subiría de nota. A la espera también del futuro de Bonaque y de Prevedini.

Sería el mejor reclamo para celebrar el IV Día Internacional del Romano, que se celebrará este martes 8 de julio con las actividades típicas de los últimos veranos.