Álex Corredera, última 'víctima' de la meritocracia de Nafti

El domingo lo sufrió en sus carnes Álex Corredera. Indiscutible y brújula del Badajoz, tuvo un comienzo titubeante esta temporada, quedándose sin saltar al césped ante el Cádiz B y siendo suplente contra el Algeciras. Finalmente terminó asentándose en el once inicial destapándose como pieza decisiva en muchos encuentros, hasta el punto de que, desde entonces, solo se ha perdido un partido, ante el Recreativo de Huelva, y fue por sanción.

Pero en el fútbol no se vive del pasado y ante el Yeclano el talentoso centrocampista catalán se cayó de la lista para sorpresa de todos. O no tanto. «A nivel individual he visto cosas que no me han gustado», destacaba Nafti en la rueda de prensa posterior al último choque del año, el empate a cero en el Nuevo Vivero ante el Murcia. No señaló directamente a nadie, al menos no explícitamente, pero se le percibía enfadado y decepcionado con el rendimiento de algunos de sus pupilos. Aquel día, los blanquinegros fueron planos y se vieron desbordados por un rival más intenso y enchufado, algo que no tolera el técnico franco-tunecino, y menos en su feudo. «Es la primera vez que doy por bueno un punto en casa», decía resignado tras un duelo que, según se desprendía de sus palabras, pasaría factura. Y así ha sido. Desbordado, perdido y sin presencia en el juego ante el conjunto pimentonero, Álex Corredera se marchaba al vestuario en el minuto 61 sustituido por Julio Gracia, al que se le vio algo más participativo y con hambre. De aquellos barros, estos lodos. El domingo faltaba el diez en la alineación y tampoco aparecía entre los suplentes. Se desataban las conjeturas y las incógnitas. «Ha sido decisión técnica mía, ni más ni menos. El jugador no ha hecho mérito para entrar en la convocatoria». Tajante y sin pelos en la lengua, así zanjaba el tema cuando se le preguntó en la comparecencia posterior a la derrota por 3-0 en tierras murcianas.

Julio Gracia salió de inicio en su puesto y Nafti volvió a usar con Corredera un recurso que ya le fue efectivo con Carlos Portero que, tras una actuación gris ante el UCAM, se quedó en la grada en el derbi con el Mérida y en la siguiente jornada volvió al once respondiendo con un doblete ante el Don Benito. Pasó más desapercibida la ausencia desde el inicio de Toni Abad, ya que el lateral valenciano ha visto amenazada su regularidad desde el cambio de sistema, alternando tres suplencias en los últimos seis encuentros. Una prueba más de que la meritocracia funciona en el Badajoz. Acertar el once en la previa es casi una quimera.