El canto del cisne latinoamericano de viejas glorias

Uno de los casos más llamativos fue el de David Trezeguet, que jugó en River Plate y en Newell´s Old Boys. Si bien es cierto que inició su carrera en el Platense argentino, Trezeguet desarrolló la mayor parte de su trayectoria profesional en el Mónaco y especialmente, en la Juventus de Turín. Además, formó parte de la mítica selección francesa de finales de los noventa que fue campeona del Mundial 1998 de Francia y de la Eurocopa 2000 celebrada en los Países Bajos, donde gracias a un gol del 'Rey David', los 'bleus' se consagraron como dueños del fútbol en los inicios del siglo XXI. La influencia del fútbol argentino en Trezeguet venía de su padre, Jorge, también futbolista pero nacido en Argentina, por lo que el atacante francés tuvo que pasar gran parte de su infancia en Buenos Aires. Siempre se confesó gran hincha de River y llegó a 'los millonarios' en el momento más crítico de la historia del equipo del Río de la Plata, cuando descendió a la 'B', la segunda división del fútbol argentino. Además, fue uno de los artífices de que River volviese a la máxima categoría, aportando trece goles en diecinueve partidos. Finalmente, concluyó su carrera en el Pune City de la India pero su paso no llegó a durar ni una temporada.

Pep Guardiola, actualmente uno de los mejores entrenadores del mundo, también acabó su carrera como jugador en el continente americano, concretamente, en los Dorados de Sinaloa de México. En su momento, se rumoreó su fichaje por River Plate pero finalmente no se concretó. Jugó diez partidos en el conjunto mexicano, anotando un solo tanto. Centrocampista sacado de la Masía por Johan Cruyff, fue piedra angular del Barcelona, donde estuvo una década, para luego probar la Serie A con el Brescia y la Roma. Posteriormente, y antes de acabar en México, jugó dos temporadas en el Al Ahli de Catar.

Antes de Guardiola, otros jugadores importantes de la historia del fútbol español como Míchel González, Emilio Butragueño o Martín Vázquez, también probaron fortuna, concretamente, en el Atlético Celaya. Otro caso fue el de Jose Mari Bakero, que tras vestir las elásticas de la Real Sociedad y el Barcelona, acabó en 1997 en los Tiburones Rojos de Veracruz.

Clarence Seedorf es otro icono del fútbol que acabó su carrera con una aventura americana. Campeón de la Champions League en cuatro ocasiones con tres equipos diferentes (Ajax, Real Madrid y Milan), acabó retirándose en el Botafogo brasileño, donde jugó dos temporadas, dando un gran rendimiento y una buena cantidad de goles para ser centrocampista (16).

Por último, está otra figura futbolística de gran calidad y buen recuerdo para los aficionados del Barcelona, el Real Madrid y el Atlético de Madrid. Se trata del alemán Bernd Schuster. El Balón de Plata en 1980 y campeón de la Eurocopa de 1980 finalizó su carrera en el Pumas mexicano, en la temporada 1996-1997. Eso sí, el polémico futbolista jugó solo nueve partidos. Luego Schuster se dedicó a la faceta de entrenador y a la de comentarista en los medios de comunicación.