Descubiertas pinturas bajomedievales en una iglesia de Toledo

En concreto, se encontraban ocultas tras el retablo mayor situado en el ábside románico de esta iglesia. Las escenas representan la Asunción de la Virgen a los cielos (advocación histórica del templo) por los ángeles y corresponden al ciclo de la Natividad, reconociéndose la Anunciación, la Visitación y la Epifanía o Adoración de los Magos. También destaca un panel anexo con una representación del apóstol Santiago como caballero, ataviado con el hábito de la Orden de Santiago y enmarcada por una inscripción de carácter votivo. Su estilo está marcado por un grafismo negro que delinea las figuras, resaltadas ocasionalmente con campos de color rojo, ocre y blanco para ciertos detalles. Este estilo, su iconografía y la grafía de la inscripción hacen pensar que datan del año 1500.

Las pinturas han sido analizadas por los profesores Santiago Manzarbeitia y Fernando Pérez Suescun, del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid, que han llegado a la conclusión de que forman parte de un conjunto pictórico mural con entidad propia y mucho más amplio de lo que los aislados restos conocidos hacían pensar. El siguiente paso será eliminar el enlucido de cal que las ocultaba antes de acometer su restauración para dejar al descubierto la totalidad del conjunto.

Según los profesores Manzarbeitia y Pérez Suescun, este tipo de retablos murales fueron un recurso habitual para los templos rurales durante la Baja Edad Media por su rapidez de ejecución y economía de la técnica pictórica mural, siendo posteriormente encalados y ocultados por retablos de madera con tablas pintadas en años posteriores.