Isla Cristina es la playa favorita de los cacereños según el GPS de sus móviles

El estudio deja claro la preferencia de los residentes en la capital por Andalucía como lugar de retiro unos días en julio y agosto, y más en particular por las playas de Huelva y Cádiz, las más próximas en España (para un buen número de localidades extremeñas, la costa más cercana es la de Portugal).

El trabajo del organismo público nacional de referencia en materia estadística ofrece datos por meses, y la suma de julio y agosto del año pasado proporciona los antes detallados. Tras las localidades citadas, las siguientes en la lista son Lepe, Cádiz, Chiclana de la Frontera, Conil, Ayamonte, Punta Umbría y Sevilla. O sea, de las diez más populares entre los cacereños, cinco están en la provincia onubense, cuatro en la gaditana y la otra es la ciudad más poblada de esa comunidad autónoma.

Hay que tener en cuenta que los resultados se refieren a términos municipales, y que algunos de los pueblos tienen en el suyo varias poblaciones. Por ejemplo, cuando la estadística cita a Lepe, se refiere a esta localidad, pero también a La Antilla e Islantilla, aunque una parte de esta última pertenece a Lepe y otra a Isla Cristina. Y Matalascañas depende del ayuntamiento de Almonte. E Isla Canela e Isla del Moral pertenecen a Ayamonte. Más ejemplos: Roche está en Conil de la Frontera, y La Barrosa en Chiclana.

Los destinos que ocupan los puestos del once al veinte en la lista de preferencias de los cacereños para julio y agosto son Chipiona, Málaga, Torremolinos, Barbate (al que pertenece Zahara de los Atunes), Rota (de quien depende Costa Ballena), Fuengirola, Jerez de la Frontera, Benalmádena, Tarifa y Benidorm.

Hay que descender bastantes posiciones en esta relación para encontrar poblaciones de la costa norte española. Las primeras en hacerlo son Gijón, Santander, Llanes (Asturias), San Sebastián, Oviedo, Sanxenxo (Pontevedra) y Vigo. Antes que algunas de ellas aparecen Barcelona y Valencia. También están en el listado destinos que no son de costa, y a los que muchos viajan por motivos distintos a los vacacionales. Es el caso de Madrid, Badajoz, Mérida, Don Benito, Salamanca, Almendralejo, Villanueva de la Serena o Zafra.

El INE obtiene esta información gracias al 'big data', o sea, al procesamiento complejo de un volumen de datos amplio. En el caso concreto de esta investigación publicada recientemente, «la fuente de información son los datos agregados proporcionados por los tres grandes operadores de telefonía móvil en España, a través de la explotación del posicionamiento de los teléfonos de sus usuarios», explica el organismo oficial.

Lo que hacen estas compañías es proporcionar al Instituto Nacional de Estadística dos datos principales de sus clientes. El primero es su residencia habitual, y el segundo la posición de su teléfono móvil, una información esta última que tienen gracias a las antenas. Tanto en un caso como en otro se trata siempre de datos anonimizados, es decir, sin incluir la identidad del titular de la línea.

Para obtener los resultados que se buscan, lo que se hace es comprobar la ubicación más repetida entre las diez de la noche y las seis de la mañana, que es la hora a la que la mayoría duerme. Y comprobar que al día siguiente se repite esta localización distinta a la habitual. Esto permite confirmar que alguien está de viaje, porque pernocta fuera de su domicilio habitual al menos dos días seguidos.

«El objetivo de esta operación, a corto plazo, es proporcionar una estimación rápida y con gran detalle del número de turistas residentes en España que viajan a otra provincia distinta de la de residencia, basándose en fuentes y procesos innovadores», explican los autores del estudio.