1.500 oraciones de piedra en la provincia de Cáceres

En la provincia de Cáceres también hay muchas oraciones de piedra, y los que se han encargado de catalogarlas han sido José Antonio Ramos Rubio y Óscar de San Macario Sánchez, que acaban de publicar el libro 'Cruceros y cruces de término de la provincia de Cáceres. Historia, arte y tradiciones', editado por la Junta, por la Editora Regional de Extremadura.

«Nos ha llevado su tiempo y trabajo –afirma José Antonio Ramos–. Hemos recorrido todos los pueblos de Cáceres y algunos más de una vez». Calcula que han visto unas 1.500 cruces de piedra, alguna de gran valor artístico como el crucero de La Nava en Ahigal, del siglo XVI, situado frente a la iglesia parroquial dedicada a la Asunción. El crucero está formado por una columna estriada, rematada en un capitel con volutas y hojas de canto, sobre el que se encuentra la cruz con una escena de la Crucifixión por un lado y por el otro de la Piedad.

También destaca el crucero de la calle del Arrabal en Cañaveral. «Para nosotros es una de las cruces más espectaculares de la provincia. Se alza en la Cañada Real. El trazado de Cañaveral fue el nervio de la reconquista y repoblación de la Extremadura leonesa, cruces como esta sirvieron para delimitar términos municipales, como la cañada de ganado trashumante que desde Cáceres subía a los montes de León». La cruz, que está muy deteriorada, representa en su anverso a María con el Niño Jesús en brazos que juega con un pájaro que lleva su madre entre las manos. Fechan este crucero en el siglo XV.

Otro crucero que llama la atención es el de la calle Real de Navaconcejo, cerca de la ermita del Cristo del Perdón. Es del siglo XVI y sobre una columna cilíndrica, totalmente lisa, hay un capitel toscano y aquí una cruz que por un lado tiene la escena de la crucifixión, realizado de una manera minuciosa y, en el anverso, está la escena de la Piedad o Quinta Angustia, donde María tiene en el regazo a su hijo tras el descendimiento de la Cruz.

En Garganta la Olla hay un crucero en la calle Piornala, que conduce al Monasterio de Yuste, junto a una fuente de tres caños con un pilón. También es del siglo XVI y tiene en el anverso de la cruz al crucificado y en el reverso La Piedad.

«En Garrovillas de Alconétar –afirma–, esta un interesantísimo Vía Crucis, con sus 14 cruces. El Vía Crucis se celebra el Viernes Santo a las doce y media de la mañana. Comienza en el atrio de la ermita del Cristo y termina en un Calvario próximo a la ermita de la Soledad». En el pedestal de la cruz central del calvario reza inscrito: «Hizo de limosna. Año de 1672». Las cruces del Vía Crucis se hicieron en 1692.

También destacan los autores las cruces de Arroyo de la Luz. El pueblo tiene un barrio llamado de las Cruces, en donde se encuentra la llamada 'De la leche', que se llama así por tener una imagen de la Virgen amamantando al Niño Jesús.

En la ciudad de Cáceres hay diez cruceros o conjuntos de cruces. El más famoso es el que se encuentra rodeado de palmeras en la Plaza de Santa Clara, de 1603, que fue derribado en un acto vandálico en 2011, restaurándolo Fátima Gibello. En la Ciudad Monumental se encuentra una cruz en la fachada del Parador de Turismo.

Está el crucero frente a la ermita del Espíritu Santo, el de la iglesia de Santiago de los Caballeros, y el ubicado junto a la ermita de San Blas. En el cementerio hay otro.

En el camino al Santuario de la Virgen de la Montaña están las cruces del Calvario, y hay otras cruces de Calvario en Las Seguras, en la carretera de Badajoz. En las afueras de la ciudad está una cruz en la ermita del castillo de las Arguijuelas de Arriba, y una en el Vado del Guijo.

Otras diez también hay en Plasencia: el conjunto de El Calvario camino de la ermita de la Virgen del Puerto; al lado la Cruz del Puerto; en el cerro de San Lázaro la conocida como Cruz de los Enamorados; la Cruz Dorada que se levantó en 1595 en el barrio de San Miguel y ahora se ubica en el camino de la puerta de Talavera a La Isla; la cruz de la iglesia de Santiago, el artístico crucero de la parroquia de Santa Elena; el del Parque de los Pinos; la Cruz de San Antón del siglo XIV; la del Hospital de la Cruz; y el crucero del cementerio.