Badajoz
Los vecinos de María Auxiliadora reclaman la renovación de sus tuberíasEl último reventón inundó tres calles y dejó un bloque sin agua tres días
Tres días sin agua y con la ola de calor llamando a la puerta. Así han pasado el fin de semana los vecinos de un ... bloque de viviendas de María Auxiliadora. La causa fue el reventón de tuberías que el viernes pasado inundó tres calles de la zona. No es la primera vez que ocurre y los residentes quieren una solución definitiva, que se cambien las tuberías.
María Auxiliadora sufre reventones de forma regular, de hecho los vecinos han aprendido a vivir entre vallas y con parte de sus aceras levantadas. En 2022 el Ayuntamiento de Badajoz incluyó esta avenida en un proyecto para renovar el abastecimiento en varias vías de la ciudad, pero finalmente no se llevó a cabo.
El Consistorio indicó, tras cancelar la obra, que haría un nuevo proyecto para renovar la red de María Auxiliadora, pero no ha habido avances en tres años. HOY ha consultado al Ayuntamiento si hay una fecha para llevar a cabo esta reforma, pero no ha obtenido respuesta.
«Hace dos años que empezaron la obra, pero no terminó y ahí (en las tuberías) todo son parches», se lamenta Antonio García, vecino de esta avenida.
Este pacense ha sido uno de los afectados por los cortes del fin de semana. Aqualia hizo el viernes un nuevo enganche para dar suministro a los vecinos de la zona y que no notasen los efectos de la avería, pero en el caso de su bloque no les llegó el agua. Estuvieron así hasta el domingo por la tarde. «Todos tuvimos que ir a casa de familiares u otros sitios para ducharnos y recoger agua. En mi caso con una persona dependiente en casa».
Para otros vecinos el corte de agua solo fue de unas horas, pero su paciencia también está al límite. «No se entiende, es una avenida principal de la ciudad y revienta casa dos por tres. Cambiaron las aceras y ya hay aceras que renovaron y que se han vuelto a romper por averías», se lamenta José Miguel Márquez, otro vecino.
Márquez pide a los representantes municipales que cumplan su palabra. «Ya nos prometieron la renovación, incluso vinieron los obreros, y nada. Lo justo es que se de prioridad a nuestra avenida porque el problema no ha desaparecido, lo hemos visto hace unos días».
En el barrio también hay miedo a nuevos reventones porque, indican, suelen producirse de forma encadenada. Los cambios de temperatura suelen afectar a las tuberías antiguas, que son de fibrocemento.
La obra cancelada
La cancelación de la obra que les prometieron en 2022 es una espina clavada en María Auxiliadora. Ese año el Ayuntamiento anunció una gran inversión, 2,1 millones de euros, para renovar las tuberías de cuatro avenidas: Ricardo Carapeto, Colón, Enrique Segura Otaño y María Auxiliadora.
Unos meses después comenzaron los trabajos y, avenida a avenida, se fue completando el cambio de red. Hasta que llegó María Auxiliadora. En marzo los operarios llegaron a esta vía de Badajoz. Los vecinos vieron como los operarios instalaron las casetas de obra junto al restaurante McDonald's junto con materiales de obra, baldosas y tuberías. El objetivo era sustituir las tuberías antiguas de fibrocemento por nuevas, en total kilómetro y medio de canalizaciones.
Durante unas semanas los obreros fueron sustituyendo los acerados de la calle, pero sin excavar hasta las tuberías. Luego, desaparecieron.
El Ayuntamiento de Badajoz indicó que retirar las tuberías de fibrocemento era muy complicado, por lo que estaban estudiando meter unas nuevas por dentro de la antigua canalización. Finalmente, sin embargo, descartaron el proyecto.
La última novedad fue hace dos años. Entonces el Consistorio indicó que haría un nuevo proyecto, más ambicioso, que sirviese para que la red se ampliase. Lo consideran necesario porque la demanda va a crecer en esa zona, debido a la ampliación de Huerta Rosales. Sin embargo, desde entonces, no ha habido novedades ni hay fecha para acometer esta inversión.
«Además de los cortes de agua tenemos una avenida en la que siempre hay levantada alguna acera, delante de Los Salesianos se lía mucho porque siempre hay vallas», se lamenta Espe Ramos, otra vecina de la zona.
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