Los Rostros del Turuñuelo ya están colocados en la sala Tarteso

Después de un exhaustivo análisis, y dos años de  periplo por  distintos museos de Madrid, los relieves del siglo V. a. C. hallados en el yacimiento de Casas del Turuñuelo de Guareña volvieron el 5 de febrero a la capital pacense, donde fueron exhibidos al por primera vez, y donde podrán volver a ser admirados desde esta primavera. Se han dispuesto siguiendo indicaciones y en los soportes diseñados por los técnicos del Instituto del Patrimonio Cultural de España.   

La Sala Tarteso que permitirá comprender mejor los hallazgos extremeños de una cultura que floreció en el suroeste de la península entre VIII y V a. C. ya tiene montadas sus vitrinas. Han finalizado las pruebas y la puesta en funcionamiento de los sistemas de iluminación. Los dispositivos audiovisuales e interactivos están listos para su uso y, en estos momentos, el equipo del museo coloca las últimas piezas en las vitrinas. Se ha dado un lugar específico a cada vestigio histórico, empleando en muchos casos soportes individuales fabricados a medida, indica la Consejería de Cultura.

 

Tras los ajustes, detalles, pruebas de funcionamiento y aprendizaje del manejo de los sistemas, los profesionales del museo se centran ahora en la colocación definitiva de las piezas más complejas y delicadas. Es decir, los hallazgos de «orfebrería, pequeños marfiles decorados y los vidrios».

Explica la Consejería de Cultura que han sido innumerables las «labores de diseño, de realización de producciones audiovisuales, de montaje de vitrinas, de instalación y pruebas de imagen, sonido o aplicaciones interactivas. Un trabajo coral en el que han colaborado decenas de personas».

La nueva sala se abrirá con algo más de cuatrocientos objetos, duplicando el número expuesto antes de la completa renovación de la sala de Protohistoria. 

Los profesionales extremeños que han trabajado en este proyecto emprendido por el Museo Arqueológico, con el respaldo de la Consejería de Cultura, han aportado «todo su conocimiento sobre la ingeniería y la museografía para imaginar un espacio novedoso y atractivo». La empresa que hasta estos días ha materializado el diseño de la sala ha aportado también su equipo técnico y montadores, «con experiencia e ilusión, a sabiendas de su importancia y trascendencia».

Desde el Arqueológico se destaca también la implicación de los colaboradores externos, unos investigadores que han contribuido con su «conocimiento en la arqueología protohistórica de nuestra región, a hacer de la nueva sala una realidad, con rigor y calidad científica».