Los okupas de Badajoz salen de la casa por la presión de los vecinos
El propietario del piso asegura que la pareja «ha desvalijado» la vivienda
Rocío Romero
Badajoz
Jueves, 22 de septiembre 2022, 09:00
La pareja que okupó un piso en el número 6 de la calle Altozano de Badajoz abandonó la vivienda sobre las 00.45 de ... esta madrugada. Los vecinos del bloque llevaban desde antes de las 21.00 haciendo sonar cacerolas para mostrar su rechazo a que se mantuvieran en la vivienda y reclamando su salida.
El propietario de la vivienda ha confirmado a HOY que la pareja «ha desvalijado» la casa, aunque en cambio sí que está limpia. «No quedan ni los apuntes de los universitarios».
Fueron los cuatro estudiantes que tienen la vivienda alquilada los que descubrieron la ocupación el pasado día 10.
«Se han ido por la presión de los vecinos. Entendieron que no podía seguir allí», asegura el dueño, quien indica que una vez que accedieron a marcharse pidieron que los congregados se fueran para salir con calma. «La gente seguía allí», señala el propietario, que en todos estos días ha pedido guardar el anonimato.
Noticia Relacionada
Más de un centenar de pacenses tratan de expulsar a los okupas con ruido
La Policía Nacional tuvo que intervenir ayer pata desalojar la protesta, que había llegado hasta las puertas de la vivienda. Posteriormente la Policía Local cortó los accesos. Aún así, vecinos y pacenses llegados de toda la ciudad se mantuvieron hasta que se les pidió que se marcharán para facilitar la salida de la pareja.
«Han dejado la lavadora, el frigorífico, el horno y poco más. Dijeron que iban a dejar las cosas de los estudiantes, pero se lo han llevado todo. Hasta un televisor. Los armarios están vacíos»
Como contó ayer HOY, horas antes de que se marcharan los okupas, más de un centenar de pacenses trataron de expulsarlos. Cuatro universitarios llegaron de vacaciones a su piso de estudiantes el pasado día 10 y encontraron que alguien había cambiado la cerradura. La Policía les confirmó que habían entrado y que los propios okupas les habían comunicado que no iban a salir del inmueble.
Los jóvenes no pudieron recuperar sus pertenencias y el propietario del piso no pudo entrar, mientras una pareja de entre 20 y 30 años continuaba haciendo uso de la casa.
La situación levantó las protestas de vecinos de la finca, residentes en la calle, compañeros de barrio y pacenses en general, que se acercaron anoche a formar ruido. Los vecinos convocaron la protesta a las 21 horas, aunque diez minutos antes ya había pacenses en la esquina de la calle Altozano más próxima a las viviendas militares armados con cacerolas, tapaderas y cucharones para hacerse oír. Como Pío García, vecino del centro, que acudió este miércoles acompañado. «Vengo porque me parece indignante que una persona pierda su derecho a la propiedad. No cabe en mi capacidad de entender».
Al grito de «okupas fuera, okupas fuera» el ambiente se fue calentando. Los coches que cruzaban la calle tocaban el claxon, los vecinos bajaban de sus pisos y otros permanecían en los balcones de las fincas cercanas.
De la veintena inicial de personas que se repartían huchas metálicas pasaron a ser más de un centenar. Entre ellos los propios estudiantes que descubrieron la okupación y sus padres. «Queremos que nos devuelvan nuestras cosas», decían.
El ambiente siguió caldeándose hasta que minutos antes de las 21.30 horas alguien abrió el portal y los manifestantes comenzaron a subir. Los concentrados trasladaron el ruido al rellano de la escalera y a la misma puerta del piso okupado, una vivienda de cinco dormitorios en el principal. Un chico golpeó la puerta en varias ocasiones y otra joven dio varias patadas hasta que tres agentes de la Policía Nacional subieron y pidieron a los manifestantes que continuaran en la calle. La mujer explicó a los agentes que ella había okupado otra vivienda con un bebé y la habían expulsado.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión