El nuevo modelo de Policía Local fija a los agentes en los barrios
El objetivo de la reorganización es que siempre haya personal del cuerpo en los distritos
El nuevo modelo de Policía Local ya está en marcha. Los agentes están trabajando de una nueva manera, bajo la fórmula de la proximidad, con el objetivo de adelantarse a los problemas de los ciudadanos.
Descubrir qué tiendas venden alcohol a menores, comprobar que los perros peligrosos vayan siempre atados o dónde hace falta un paso de peatones. La policía de barrio tiene por fin detectar este tipo de asuntos antes de que los ciudadanos tengan que presentar las quejas.
El lunes entró en vigor esta nueva forma de trabajar, lo que se ha hecho posible con la incorporación de 14 agentes. Son 24 policías los que están destinados ya a los cuatro sectores en los que se ha dividido la ciudad. Son el centro; San Roque, las urbanizaciones y Cerro Gordo; Valdepasillas y urbanizaciones, y la margen derecha. El parque del río será atendido por agentes de la margen derecha y el centro.
En cada uno de estos sectores hay ya un punto de atención al ciudadano. Están en la antigua jefatura de la calle Montesinos (centro), la nueva de Valdepasillas, el centro cívico de San Fernando y la subinspección de San Roque. En cada uno de estos puntos habrá agentes en segunda actividad que se encargarán de recoger quejas y de atender al personal.
El superintendente de la Policía Local, Rubén Muñoz, explica que quieren tener policías especializados en las distintas zonas de la ciudad. Así podrán realizar seguimiento de los asuntos de cada barriada. Entre otras cosas porque los agentes serán los mismos todos los días en horarios de mañana y tarde. De esta forma podrán recoger información de los vecinos para mejorar la atención que se les presta. «Habrá policías en Suerte de Saavedra, Cerro Gordo, la barriada de Llera... Cada día pasarán por cada calle». En dos turnos de 7,5 horas patrullarán durante 15 horas. Estarán coordinados por el subinspector Antonio Pozón.
La clave de la organización es que la policía de barrio siempre estará en cada barrio. De esta forma, se evitaría dejar los distritos sin agentes en el caso de que ocurran emergencias en otros puntos de la ciudad.
En bicicleta
La Policía tiene otras unidades encargadas de los atestados de tráfico, las noches y fines de semana, los que van de paisano para evitar la venta ambulante o dispensación de alcohol a menores, el depósito de vehículos o la seguridad de lugares especiales como el Ayuntamiento. Con esta unidad «se evita dejar los barrios sin policías». En cada distrito habrá siempre dos agentes por la mañana y otros dos por la tarde. Habrá dos patrullas de refuerzo en cada turno para los cuatro distritos. Los agentes irán a pie, en moto o en bicicleta.
La plantilla ronda los 200 agentes con los 14 que se acaban de incorporar. De todos estos, 48 policías se encuentran en segunda actividad y 150 están operativos.