«En noviembre cumplo once años esperando que abran los juzgados de la Ronda Norte de Badajoz»
Mª Jesús García del Moral. Cafetería del Moral ·
Cuando en 2011 abrió su cafetería creyó que los juzgados le aportarían la clientela que necesitaba, pero 11 años después sigue sin hacerse realidadCuando María Jesús García del Moral abrió su cafetería en la Ronda Norte la construcción de los nuevos juzgados parecía inminente. Once años después, sigue ... esperando que ese momento llegue.
–¿Será esta vez la definitiva?
–Eso espero. El próximo 24 de noviembre cumplo 11 años aquí.
–¿Por qué eligió este lugar para su negocio?
–Elegí esta calle porque está junto a los nuevos juzgados. Cuando yo abrí el centro de Badajoz estaba lleno de locales y buscaba un lugar con futuro. Pero ha pasado mucho tiempo y los juzgados siguen en obras.
–¿Cómo era la Ronda Norte hace once años?
–En mi bloque estaban entregando pisos y en el de enfrente sólo había tres familias. Los últimos pisos los vendió el banco porque la obra se quedó sin terminar.
–¿Pensaba que la apertura de los juzgados sería inminente?
–Yo alquilé con opción a compra durante los dos primeros años, pero lógicamente renuncié a comprar porque comenzaron a surgir dudas.
–¿Cuántas veces ha escuchado decir que la obra terminaba?
–Tres veces. Recuerdo cuando vino el ministro y dijo que en pocos meses estarían acabados los juzgados. Poco después se paró la obra, después se retomó y ahora vuelve a reiniciarse. Esperemos que sea la definitiva.
–¿Cuándo cree que abrirán?
–Me daría por satisfecha si terminan al año que viene. Estos años han sido muy duros, con la pandemia de por medio. Realmente tengo una plantilla por encima de mis posibilidades pero no quiero renunciar a mis cuatro trabajadoras porque ya están formadas y confío en que pronto habrá más movimiento.
–¿Cómo imagina su negocio cuando los juzgados abran?
–Me gustaría pensar que todos los días van a ser como ahora es un domingo. Aquí viene mucha gente los fines de semana pero llevo muchos años perdiendo la oportunidad que supone estar junto a un gran edificio judicial.
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