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Una estufa ha sido la causa del fuego que se ha originado este lunes a primera hora de la tarde en Badajoz. Los hechos han ocurrido en la primera planta de una vivienda ubicada en la calle Benegas, cerca del Casco Antiguo de Badajoz.
Poco antes de las 16.00 horas los bomberos del Ayuntamiento de Badajoz llegaron a la vivienda. Allí las llamas devoraban el salón de la vivienda, que además según indican los agentes tenía «bastantes enseres por el medio», lo que ayuda a propagar las llamas.
Por el momento no trascendido de qué tipo era la estufa y el salón de la vivienda sí ha quedado bastante dañado. Además, gran cantidad de humo que había en el inmueble ha dificultado la labor de los bomberos.
El piso tan solo estaba ocupado por una mujer de mediana edad que no ha sufrido heridas a consecuencia del fuego, pero que tuvo que ser atendida por una ambulancia de la Cruz Roja por el estado de nerviosismo en el que se encontraba. En el lugar también estaba otra ambulancia del Servicio Extremeño de Salud (SES).
El jefe de servicio del parque de bomberos destaca la importancia de actuar correctamente en estos casos, ya que gracias a que el resto de vecinos y la propia inquilina han mantenido las puertas cerradas el fuego no se ha propagado a otras estancias de la casa, ni a viviendas vecinas.
Como consecuencia del incendio el salón ha quedado «bastante afectado» y los bomberos indican que en unos días no se podrá ocupar la vivienda debido al humo que alberga en su interior.
Hasta el lugar de los hechos se han desplazado tres vehículos del parque de bomberos del Ayuntameinto, dos de ellos de bomba y el vehículo de mando. En total han sido nueve, los agentes que han intervenido para la extición de las llamas. También ha sido necesaria la intervención de Cruz Roja y Policía Local que han cortado la calle durante la actuación de los bomberos.
Cabe destacar que aunque con la llegada del frío es importante mantener los hogares cálidos y confortables. Esto puede conllevar ciertos riesgos al encender braseros de picón o chimeneas. Los principales peligros, según los bomberos del Consorcio provincial de la Diputación de Badajoz, son la inhalación de monóxido de carbono y los incendios. Los efectos tóxicos de este gas pueden variar en función del tiempo de exposición, de su concentración y de su estado físico.
Algunas recomendaciones para evitar la acumulación de este gas son: ventilar bien la habitación en la que esté el brasero o la chimenea y cuidar que estén totalmente apagados a la hora de dormir.
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