Un memorial para las víctimas de la riada de Badajoz

El próximo mes de noviembre se cumplirán 25 años de la tragedia, que dejó otros tres muertos en Valverde de Leganés, y para recordar la efemérides se está preparando una placa donde queden grabados los nombres de todos los fallecidos en la ciudad de Badajoz.

La placa, que irá sujeta sobre una peana, se colocará en el parque fluvial en la confluencia de los arroyos Rivillas y Calamón, el punto donde más personas perdieron la vida en la madrugada del 5 al 6 de noviembre por la crecida del agua.

Esta es la alternativa planteada por el Ayuntamiento a la petición de los vecinos del Cerro de Reyes, que aspiraban a que la estatua dedicada a las víctimas que está en el parque de la Trinidad, se trasladara a la pradera de los arroyos, a la altura del puente de la llamada 'autopista' que da acceso a la carretera de Sevilla. Era una reivindicación que querían que se hiciera realidad coincidiendo con los 25 años de la riada.

El Ayuntamiento accedió inicialmente a su petición e incluyó una partida de 11.000 euros en el plan de impulso municipal aprobado en noviembre del año pasado. Con este dinero pretendía costear el traslado hasta la nueva ubicación. La idea, sin embargo, ha quedado descartada.

El motivo, explica el concejal de Patrimonio, Jaime Mejías, es que «ni el Club Rotary, que fue quien sufragó la estatua, ni los vecinos de San Roque estaban de acuerdo con que la escultura que homenajea a las víctimas se cambiase de sitio».

Si bien el Cerro de Reyes fue el barrio al que más duramente azotó la riada, también se vieron afectados los de San Roque y Pardaleras, que son las tres zonas de la ciudad que atraviesan los arroyos Rivillas y Calamón. «Cuando una estatua permanece mucho tiempo en un sitio, es difícil moverla», reconoce Mejías.

El Homenaje a las Víctimas de la Riada de 1997 lleva desde 2001 en el baluarte de la Trinidad, a la entrada de la ronda del Pilar. La escultura de bronce, obra de Rodrigo Espada, fue costeada por el Club Rotary Badajoz. La estatua representa a una mujer sentada al borde de un tejado que arranca de las aguas a una niña mientras un hombre situado frente a ella le ofrece su ayuda. Unos muros de ladrillo visto adosados a la peana simbolizan una casa de las muchas que fueron destruidas la fatídica madrugada.

Desde entonces, este ha sido el lugar en el que cada noviembre se ha hecho el homenaje a los fallecidos. Este año habrá un segundo punto de recuerdo, que servirá de memorial, porque dejará grabado en bronce el nombre de los 22 pacenses que perdieron la vida. La idea ha gustado mucho a los vecinos del Cerro de Reyes.

Mejías avanza que en su Concejalía ya han hecho el trabajo de recopilar y contrastar el nombre y los apellidos de todas las víctimas que murieron en Badajoz. Como el dinero que tenían reservado para trasladar la estatua de la riada no lo han gastado, lo dedicarán a encargar la placa y el pedestal a un escultor que, avanza Mejías, no está decidido pero quieren que sea de la ciudad.

La idea es inaugurar el memorial coincidiendo con los actos de recuerdo del 25 aniversario. En este sentido, en el barrio del Cerro de Reyes se puso en marcha a inicios de año el proyecto llamado «Hazte una PCR», iniciales que se corresponden con el título del programa, Promoción del Cerro de Reyes.

Está promovido por un grupo de vecinos surgido de la parroquia de Jesús Obrero y su intención es recordar la tragedia, pero también reivindicar una mirada positiva sobre su barrio. Para ello, están trabajando en una programación de actos como una exposición fotográfica sobre las consecuencias de la riada y la evolución posterior del barrio, un concierto o eventos para unir a los vecinos.

Uno de los eventos más especiales ya se celebró la pasada Semana Santa, cuando la Hermandad de Jesús Obrero y Dulce Nombre de María trasladó su vía crucis viviente a los arroyos.