La ampliación de la carretera del aeropuerto de Badajoz sigue pendiente del cambio de titularidad

Esta carretera, el único acceso al aeródromo pacense, pertenece a la Confederación Hidrográfica del Guadiana. En octubre del año pasado la Junta de Extremadura anunció que destinaría dos millones de euros a mejorarla, ya que es demasiado estrecha para el tráfico que soporta. Para ello debía solicitar la cesión a la CHG.

Cinco meses después los trámites no han avanzado demasiado, aunque los dos millones de euros dependen de los Presupuestos regionales de 2022. Desde la Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda indican que «actualmente se continúa con la tramitación para la cesión de la misma a la Junta de Extremadura».

La Confederación Hidrográfica del Guadiana indica por su parte que la Dirección General de Patrimonio del Estado «está pendientes de recibir la información requerida a la Junta de Extremadura para continuar con la tramitación de la desadscripción».

Los que más han reivindicado el arreglo de esta vía son los vecinos de la pedanía de Balboa. Varios de ellos han sufrido accidentes al salirse de esta vía tan estrecha. Los siniestros son peligrosos porque hay un desnivel y los coches se golpean contra las acequias.

La BA-023 está dividida en dos tramos. Uno de ellos une la carretera de Talavera con el cruce del aeropuerto y la entrada a Balboa y el otro sigue desde la pedanía hacía Talavera la Real. Ambos son estrechos, pero el segundo tramo (Balboa-Talavera) es aún más peligroso porque hay árboles en los laterales, curvas cerradas y el firme está en peores condiciones.

La vía, además, es el acceso al Aeropuerto de Badajoz y, por lo tanto, la primera imagen que reciben los viajeros que utilizan este medio de transporte.

A este se suma que hay varias empresas agroalimentarias en la misma ruta y esto provoca que los turismo convivan con un tránsito constante de camiones de gran tamaño, especialmente en el tramo más cercano a Villafranco del Guadiana.