Fragoso saca adelante sus primeros presupuestos en solitario

El PP sacó ayer sus primeros presupuestos adelante con Francisco Javier Fragoso como alcalde. Y lo hizo con la mayoría de los 17 ediles populares y el rechazo de los dos grupos de la oposición. Si para el Gobierno se trata de una previsión de gastos ajustada a los ingresos reales, para Izquierda Unida representan «el austericidio» y, para el PSOE, una falsedad.

Las cuentas para el próximo año del Ayuntamiento y sus organismos autónomos asciende a 99 millones de euros, 3,7 millones menos que este ejercicio. El Consistorio requiere de 92,3 millones de euros, un 2,6% menos que este año, para funcionar.

El concejal de Hacienda, Alberto Astorga, defendió ayer sus cuentas como unos presupuestos con rigor. «Fieles a la filosofía de no gastar lo que no se puede», argumentó. Explicó que espera que baje la recaudación por los impuestos indirectos, como el IVA, y el de obras y construcciones. En total, un 15,39%. Desciende, también, la aportación de otras administraciones un 2,55%, y, además, se pedirá menos al banco que este año. Se prevé contraer un préstamo de dos millones de euros, 1,2 más bajo que el incluido en las cuentas del presente ejercicio. Sin embargo, se espera incrementar la recaudación por multas en 300.000 euros, un 30% más que en 2012.

Gastos e inversiones

En cuanto a los gastos, descienden todas las partidas, salvo la referente a personal. El Ayuntamiento de Badajoz gastará 35,2 de los 92,3 millones de su presupuesto en pagar las nóminas de sus empleados, funcionarios y laborales. La remodelación de la plaza de las Américas y la creación de un parque en el entorno del pabellón Nuria Cabanillas serán las inversiones, que suman dos millones de euros.

«Son unos presupuestos adaptados a la realidad y para atender a las necesidades», destacó Astorga.

No lo ven igual desde la bancada del PSOE. Para Celestino Vegas, su portavoz, «no son realistas, ni austeros ni rigurosos». Vegas recorrió las cuentas desde 2008 para argumentar que las inversiones recogidas en los presupuestos no suelen salir adelante. A su juicio, «las que salen ganando en la ciudad son las empresas que tienen las contratas: Aqualia, FCC y Tubasa». «Ustedes llevan 20 años aquí. Cuando llegaron había empresas, pero lo que han hecho es incrementar la cultura del pelotazo urbanístico», declaró, «Y se han cargado el empleo».

Es precisamente empleo lo que hace falta en estas cuentas, a juicio del portavoz de Izquierda Unida. «No hay iniciativas para crear empleo, ni directo ni indirecto», sentenció.

Insolidarios, antisociales y raquíticos son algunos de los adjetivos que le dedicó Manuel Sosa a los presupuestos. Recuperó la antigua propuesta de crear una tasa por colocación de vallas publicitarias para incrementar los ingresos. Criticó también que solo dedique 11.000 euros al comercio. «Con esta política, la ciudad se muere», manifestó. El portavoz también lamentó el «sesgo ideológico ultraconservador que guía la concesión de subvenciones».

A los dos respondió de nuevo Alberto Astorga. «Los presupuestos no pueden ser expansivos, porque estamos en crisis». El edil hizo hincapié en que el Consistorio paga a los proveedores en un periodo de entre 20 y 25 días, lo que es posible porque el Ayuntamiento «gasta si hay financiación».

Astorga también indicó que sube la previsión de multas de tráfico porque «hay un problema de seguridad vial en la ciudad» y se cometen muchas infracciones.

Aunque protagonizaron gran parte de la sesión, los presupuestos no fueron el único punto del orden del día. Una nueva polémica estuvo en la aprobación del incremento del pago a FCC por la limpieza de las calles y la recogida de basuras. Se trata de una revisión del canon anual, equivalente al 85% del IPC. Son 408.674 euros más, que eleva el precio a 10.166.778 euros.

Desde IU, Manuel Sosa aseguró que la empresa contrata a los trabajadores por un periodo de entre tres y seis meses, así como que les programan turnos de trabajo de 45 días seguidos sin descansar. Por ello, consideró «increíble que el Ayuntamiento les incremente la aportación teniendo en cuenta las condiciones con las que obliga a trabajar a sus empleados». Tanto el alcalde, Francisco Javier Fragoso, como el edil de Hacienda, Alberto Astorga, incidieron en que el Ayuntamiento «cumple escrupulosamente el contrato», en el cual se pactó la revisión de los precios a partir de 2012.