El peligro de la mesa camilla

En la última semana la temperatura mínima de la ciudad ha llegado a estar en 4 grados bajo cero y en los próximos días rozará los cero grados. El frío está golpeando con fuerza Badajoz este otoño y el mejor remedio, en muchos casos, es un brasero y una mesa camilla. Los bomberos, sin embargo, piden precaución porque los incendios por sistemas de calefacción son muy peligrosos.

En lo que va de año el Servicio Municipal de Incendios ha tenido que atender 7 fuegos en viviendas debido a braseros o calefactores. Se trata de una cifra similar a la de otros años. Desde 2010, en total, ha habido 23 siniestros de este tipo.

El número, sin embargo, no es lo más destacado de estos incidentes sino el grave riesgo en que sitúan a los ocupantes de las casas. Por ejemplo, en lo que va de año ha habido 12 fuegos que comenzaron en las cocinas pacenses y desde 2010 son 67, pero el jefe del Servicio Municipal de Extinción de Incendios de Badajoz, Basilio González, confirma que los casos con sistemas de calefacción implicados son mucho más peligrosos. «Normalmente un incendio en la cocina se produce cuando la persona está allí, está alerta y en caso de fuego abandona la casa. Los braseros pueden pasar de noche o cuando las personas están descansando y el peligro es mayor».

Uno de los accidentes más repetidos en Badajoz, según González, es que la llama o resistencia del brasero esté descubierta y prenda, por ejemplo, la falda de la mesa camilla u otro material textil. En solo unos minutos la habituación puede estar llena de monóxido de carbono. «El peligro de estos incendios es que hay personas involucradas pero pueden estar en la casa sin darse cuenta. Este gas es narcotizante y puede provocar lo que llaman la muerte dulce, quedarse dormido y asfixiarse», explica el máximo responsable de los bomberos pacenses.

González recomienda, por tanto, proteger con una rejilla las llamas o resistencias de los calefactores de combustión. También explica que hay métodos más seguros, como los radiadores de aceite o agua. Ante todo tener precaución.

Ante un incendio

Con motivo de la época de mayor frío Cruz Roja ha realizado una serie de recomendaciones para evitar los fuegos a causa de los sistemas de calefacción. Así mismo el director de comunicación y relaciones externas de Cruz Roja Extremadura, Jesús López Santana, recuerda que también es importante saber qué hacer en caso de incendio. «No hay que perder la calma. Hay que abandonar la estancia salvo en casos muy concretos. Por ejemplo, un fuego pequeño en la cocina y que el propietario tenga un extintor y sepa manejarlo. Si no es mejor dejar la casa», pide.

«También es básico no pararse a recoger cosas. Un incendio de un sofá con una colilla, por ejemplo, puede provocar que el salón entero se queme en dos minutos», añade López Santana. Otro consejo básico, al huir del incendio, es cerrar las puertas que vaya superando a su paso. Con esta sencilla acción se puede evitar que el fuego se propague al resto del edificio. «Hace poco hubo un incendio en un piso de estudiantes en Valdepasillas y pasó todo lo contrario. Pensaron que abrir las puertas y ventanas sería mejor y el aire alimentó el fuego. Hay que cerrar la puerta».

En caso de que haya humo, el responsable de Cruz Roja recomienda marcharse agachados. «El aire caliente tiende a subir y es un humo que puede intoxicar». Por último, hay que llamar al 112 lo antes posible.

En cuanto a los sistemas de calefacción, Cruz Roja divide sus consejos en tres bloques. El primero son las calefacciones centrales que cada vez están más extendidas porque se instalan en los bloques de viviendas. En este caso, Jesús López Santana explica que apenas hay riesgos porque no se producen incidentes.

El segundo bloque son los radiadores eléctricos. En este caso el consejo fundamental es tener cuidado con los enchufes para evitar un posible cortocircuito que inicie el fuego. También recomiendan desde Cruz Roja no acercar telas a estas calefacciones ni usarlas en el baño. «La electricidad y la humedad son una mala combinación. «Es mejor evitarlo».

Por último, el tercer bloque se centra en las calefacciones de combustión que son las que más incidentes protagonizan, tanto los braseros como las chimeneas. En el caso de los primeros el consejo fundamental es que la habitación en la que se instalen esté bien ventilada para evitar una posible intoxicación por monóxido de carbono. También es básico que no se acerquen telas que puedan prender y no dormir en una habitación con este sistema, ya que es mejor estar vigilante.