Satisfacción con la Feria de Día

Gastan menos que otros años, pero los pacenses responden positivamente a la Feria de Día. Los hosteleros del Casco Antiguo están satisfechos con el nivel de ocupación que están registrando los bares y restaurantes durante estos días.

Pasado el ecuador de las fiestas de San Juan, los responsables de estos locales hacen un balance positivo de la Feria de Día. Apuntan que los establecimientos del centro de la ciudad están registrando una media del 70% de ocupación por día, dato que mejora la cifra de 2011 pero que sigue estando muy por debajo de años anteriores.

«No nos podemos quejar. Dentro de la situación en la que estamos y las circunstancias que viven los ciudadanos la cosa marcha bastante bien. De todos modos, esperamos que los días que faltan de feria sean jornadas fuertes. Confiamos en que venga mucha gente. Creo que haremos una buena feria. Si es así, superaremos las cifras del año pasado», explica Miguel Ángel Moreno, gerente del Café Victoria.

Moreno afirma que la feria de 2011 fue nefasta para la hostelería. «La coincidencia de fechas es clave en este aspecto. El año pasado finalizó el día 26 y este año el día 1. Mucha gente ha cobrado. Además, el puente ha correspondido con el último fin de semana de feria. Todo esto nos beneficia», dice.

La crisis económica sigue mandando en los bolsillos de los pacenses, que gastan menos durante estas jornadas de feria. «El horario de comida funciona bien. La ocupación oscila entre el 60% y el 80%. Sin embargo, a partir de las cuatro de la tarde comienza a llegar mucha más gente para tomar las copas. Muchos comen en casa y salen fuera para ahorrar», agrega Moreno. «La gente está animada, pero son muchos días de Feria. No se pueden permitir gastar a diario 50 o 60 euros. La cosa no está para tirar cohetes», manifiesta Inocente Jiménez, de La Corchuela.

Parece que el horario de limpieza de la feria tampoco complace a los hosteleros. A las siete de la tarde los operarios de FCC, la empresa adjudicataria de este servicio, comienzan a barrer y retirar la suciedad que se genera en las calles del Casco Antiguo. «Antes teníamos dos horas más de venta, ya que la gente aguantaba hasta las nueve de la noche. Aunque siempre queda gente, interrumpe el ambiente y baja el consumo», subraya Moreno.

Este año la música, las tapas y las ganas de fiesta están compartiendo protagonismo en la Feria de Día con las altas temperaturas. El calor sofocante que se está registrando estas jornadas vacía a mediodía las terrazas de los bares del centro y abarrota el interior de estos locales. Cualquiera que haya pasado estos días por las calles del Casco Antiguo entre la 13.30 y las 16.30 horas ha podido comprobar que la mayoría de los veladores que los establecimientos hosteleros instalan en las vías se encontraban prácticamente desérticos. Pocos eran los valientes que se atrevían a tomar su caña o refresco fuera de los locales.

«La gente busca el aire acondicionado. Hay personas que dan varias vueltas y aún así no pueden entrar, sobre todo en las horas punta, entre las dos y media y las seis y media», destaca Inocente Jiménez.

De bares estuvo Víctor Moirón. Este joven de Olivenza se acercó ayer al centro de Badajoz con varios amigos para palpar el ambiente de la Feria de Día. «Hacía años que no venía y me apetecía volver», señaló. Moirón reconoce que prefiere vivir la Feria en el Casco Antiguo que en el real pacense. «El recinto ferial está más lejos y tienes que buscar medio de transporte. Además, allí la sensación de calor debe de ser mucho peor. En el centro puedes estar dentro de los bares. A mí me gusta el rollo que hay en el casco histórico», resalta.

Precisamente, la cercanía, la comodidad y el clima son algunos de los factores que hacen a los pacenses decantarse por esta zona en lugar de trasladarse al recinto ferial. «No es preciso coger el coche para venir al centro. Además, al contar con unas calles tan estrechas las vías son más sombrías, lo que supone varios grados menos que en cualquier otro sitio», indica Miguel Ángel Moreno.

Como es habitual, los pacenses tienen ganas de feria. «La fiesta nos gusta a todos. Otra cosa es que haya dinero para disfrutarla», asevera Inocente Jiménez.