Vecinos de San Martín piden medidas contra los ruidos y el abandono

No son los únicos. Pero sí de los primeros en abrir brecha en pro de su causa en las redes sociales. A los vecinos de la calle Patalón y su página de denuncia en Facebook 'Queremos dormir en Plasencia' sigue en esa red social 'Resbaladero de San Martín'. Es otra iniciativa ciudadana que divulga los problemas de convivencia en esa zona de la ciudad y pide soluciones.

Los políticos tienen un nuevo frente social y los movimientos vecinales otros cauces de expresión. Creada el lunes, 'Resbaladero de San Martín' cuenta ya con decenas de amigos y de apoyos explícitos. Entre los primeros, ciudadanos, entidades o el PP y su candidato a la Alcaldía. Entre los segundos, Iniciativa Socialista, de Javier Caso, y UPEx, que se ofrecen a liderar su causa ante las instituciones y responsables políticos. El primero califica de penosa la situación y muestra su entera y total solidaridad. 'Novios' no le van a faltar a seis meses de las municipales. A los residentes del resbaladero se suman también otros de la zona de la calle Esparrillas que comparten problemas comunes de ruidos y de limpieza.

Los vecinos tienen previsto celebrar una reunión que concluya con un documento que plasme sus reivindicaciones para trasladarlas a los responsables en busca de soluciones reales. Se trata, explica un residente, de unir a los vecinos para que su demanda tenga más fuerza.

Riesgo evidente

En la calle, denuncian que tienen ruinosos inmuebles con evidente riesgo de desprendimiento y sin medidas de seguridad suficientes. Es algo apreciable a simple vista. Además de pintadas, ruidos y molestias y suciedad durante las madrugadas de todos fines de semana producidos por clientes que acuden y los pubs de la calle. Así retratan la situación que soportan desde hace unos años. En una buena parte son personas mayores.

La ruinosa fachada de un edificio vaciado hace dos años y con todo el aspecto de abandonado tiene en vilo a algunos residentes. Más viendo el riesgo real, ya que hubo un desprendimiento y las vallas no protegen del peligro. Además, justo enfrente están los salones parroquiales, a los que acuden numerosos niños. Los anunciados apartamentos se los ha debido tragar la crisis. Y Patrimonio no asoma. Los accesos están tapiados. Son varias las casas abandonadas, tapiadas y abandonadas en ese tramo. Padecen el mal del despoblamiento que afecta al centro histórico.

Informan vecinos que algún residente ha tenido ya reuniones con los concejales de Interior y de Servicios. Por los problemas de ruidos y de falta de limpieza y salubridad. El baldeo que se lleva a cabo ha mejorado la situación. Aunque se quejan de que la empresa de la limpieza no siempre 'pasa la manguera' para acabar con orines o vómitos.

Critican las voces de los jóvenes que beben en la calle hasta entrada la madrugada. Salen de los locales y se quedan en la vía pública.

También quieren que todos los locales se adecuen a la normativa y cumplan los requisitos y horarios en función de su clasificación. Todo esto se acabaría si la Policía Local pasara por la calle y tomara medidas sancionadoras, plantea un vecino. Para cumplir la normativa.