Ver fotos
«Debo llevar más de cien premios; la verdad es que no los cuento»
El acuarelista cacereño es uno de los artistas más premiados en los concursos de pintura rápida en España Federico Plasencia Pintor
Pocos pintores han recibido en España más premios que el cacereño Federico Plasencia, un artista que es famoso en el mundo de la acuarela por ganar numerosos concursos de pintura rápida.
–¿Quién le enseñó a pintar?
–Me enseñó un tío mío que vivía en Cañaveral, Vicente Boticario.
–¿Se dedicaba profesionalmente a la pintura?
–Sí. Era un gran acuarelista y hacía, sobre todo, muchas perspectivas arquitectónicas de edificios en proyecto, antes de construirse. Trabajó mucho en Cáceres y en Madrid. Yo hice arquitectura técnica y estuve un tiempo con él trabajando, también haciendo perspectivas arquitectónicas, hasta que vino el ordenador y ya empezaron las empresas a hacer las perspectivas con ordenador y, en cierto modo, se nos acabó el trabajo.
–El progreso que acaba con artistas...
–Sí. Vinieron las máquinas y nos cortaron el rollo; pero bueno, hoy en día parece que vuelve el gusto por lo artesanal. Lo hecho a mano prevalece, pero la gente ya no paga lo que tendría que pagar.
–¿Fue entonces cuando empezó con la acuarela a nivel profesional?
–Empecé cuando dejé de tener trabajo en arquitectura. Al no tener trabajo de aparejador me reconvertí en pintor, y me dedique más a la pintura rápida por toda España, empecé a dedicarme más profesionalmente en el año 2010.
–¿La técnica que usa es la aprendida de tu tío o hay mucho de autodidacta?
–De mi tío recibí algunas nociones y lecciones y le vi a él trabajar mucho; pero luego he aprendido de manera autodidacta, pintando mucho y viendo el trabajo de muchos pintores.
«Al no tener trabajo de aparejador me reconvertí en pintor, y me dediqué a la pintura rápida»
CRISIS
–Sobre todo a acuarelistas...
–Sí, porque la acuarela es la técnica con la que más cómodo me siento, con la que mejor me expreso; pero también he visto la técnica de otros pintores que utilizan el óleo o el acrílico, que también te enriquece.
–¿Se presenta a muchos premios de pintura al aire libre?
–A casi todos los que puedo que no estén demasiado lejos de Cáceres. Pero vamos, es un poco por temporadas. Hay temporadas que iba a todo lo que podía porque tenía una pasión por la pintura rápida impresionante, y ahora ya estoy un poco más calmado y no voy a tantos; pero la verdad es que me gusta muchísimo ir a concursos de pintura.
–Siempre compitiendo...
–Sí, si vas a los concursos de pintura rápida al nivel al que voy yo, al nivel que vamos una serie de compañeros, estás compitiendo.
–Debe ser difícil estar trabajando pendiente del tiempo.
–Claro, y más en mi caso que soy un pintor más bien lento; para mí eso es un hándicap que he superado con el paso de los años, porque al principio no me daba tiempo a terminar el cuadro; pero vas cogiendo oficio, disciplina y vas mejorando la técnica. Claro, así salen cosas que no salen en el estudio, son obras mucho más frescas, más intuitivas.
–¿Cuánto tiempo tienen para entregar la obra?
–La media es de unas seis horas. Hay concursos en los que tienes que entregar a la una de la tarde y en otros a las seis de la tarde.
–¿La acuarela es lo mejor para los paisajes?
–Lo mejor, no. No deja de ser una técnica peculiar, que usa el agua como elemento principal, y permite hacer obras diferentes al óleo, son obras irrepetibles porque el agua se mueve por donde quiere y dependiendo de la humedad y de la temperatura, de una serie de factores, es irrepetible. Sin embargo el óleo se puede repetir uno exactamente igual a otro, pero en una acuarela es muy difícil o casi imposible repetirlo. Yo uso la acuarela para el paisaje porque es la técnica que permite expresarme como yo quiero, más cómodamente, consiguiendo resultados que, más o menos desearía obtener. Con el óleo me cuesta bastante más y no consigo lo que yo quiero.
–¿Cuando va a un concurso llevas algo preparado de lo que quieres hacer?
– Lo mejor es ir sin preparar nada. Es mucho más bonito llegar a un sitio y sorprenderte, que no haberlo visto antes en google.
«Extremadura es un paraíso para pintar, hay mucho contraste»
Paisaje
–¿Le gusta exponer tu obra en bares y restaurantes?
–Sí, porque va mucho público y hay más probabilidad de que vean tu obra. A las galerías va un público más específico.
–¿Hace mucho trabajo por encargo?
–Sí, pero soy algo reacio porque no eres libre, no haces lo que quieres. Estás pensando en que el resultado final le guste al cliente, no que te guste a ti. De todas formas, los encargos también están bien. Los pintores antiguos solo pintaban de encargo.
–¿Prefiere algún sitio de España más que otro para pintar?
–Castilla La Mancha son paisajes más áridos, más planos, hay menos vegetación, menos montaña, menos contrastes. A mí me gustan más temas de agua, de vegetación. Extremadura es un paraíso para pintar, hay mucho contraste.
–¿Con los concursos hace temporadas? ¿Cómo los toreros?
–Sí (se ríe), como los toreros. Empieza en marzo y el año pasado terminé el 15 de diciembre.
–¿Cuántos premios lleva de concursos al aire libre?
–Debo llevar más de cien; la verdad es que no los cuento.
–Parece que hay mucha afición a la acuarela.
–Sí, a nivel mundial hay una afición bastante fuerte. Hay mucha gente que le gusta ver demostraciones de acuarela. La acuarela da una sensación de frescura total, de inmediatez, para capturar el instante.
–¿Con qué está ahora?
–En esta época del año estoy trabajando más por encargo, trabajo en estudio. Quiero empezar una serie de acuarelas de Los Barruecos. Hace 20 años hice una exposición de Los Barruecos y 20 años después quiero retomar el tema.