La subida salarial en el empleo público multiplica por cuatro al sector privado

El sueldo en la Administración General del Estado (salario base y complemento de destino), que sirve de referencia para el sector público, ha crecido un 13,3% en los últimos diez años. Así se refleja al comparar las tablas retributivas de 2012 con la que se ha aprobado para el presente ejercicio y que incluye una subida adicional del 1,5% antes de que termine 2022, con lo que se llegará a un total del 3,5%.

Este resultado no es extensible a todas las administraciones, ya que depende de las decisiones en cada ámbito. Por ejemplo, la Junta de Extremadura no aplicó en todo su alcance el incremento permitido para 2020. Eso hace que para un trabajador autonómico el aumento en el salario base haya sido del 11,1% en estos diez años, dos puntos menos que en la Administración del Estado.

Este crecimiento tampoco ha sido lineal, sino que se ha concentrado en los últimos años. En 2012 (en el que además se suprimió una paga extra que después se recuperó), 2013, 2014 y 2015 no hubo subidas salariales, lo que llevó a una pérdida de poder adquisitivo. Las leyes de Presupuestos del Estado no contemplaron un incremento hasta 2016 y apenas fue del 1%, lo que se repitió en 2017. En 2018 fue del 1,5%, a lo que se sumó un 0,25% adicional a mediados de año. En 2019 y 2020, con las cuentas prorrogadas, el aumento se aplicó por real decreto-ley y llegó al 2,25% (ampliable hasta el 2,75%) y 2%, respectivamente (en este último caso la Junta solo lo aplicó en diciembre de ese año). En 2021 fue del 0,9% y para este año se ha llegado al 3,5%. La actualización anual ha vuelto a asentarse, pero con un punto de partida condicionado por cuatro ejercicios de congelación.

En cuanto al sector privado, según la Encuesta anual de coste laboral que elabora el Instituto Nacional de Estadística en 2012 el sueldo bruto medio en Extremadura era de algo más de 26.006 euros. Los últimos datos disponibles, de 2021, elevan la cifra a casi 26.580 euros, lo que representa un incremento del 2,2%.

Para conocer la subida en lo que va de año hay que recurrir a la Encuesta trimestral de coste laboral, que recoge el sueldo bruto mensual. En el segundo trimestre de este año se situó en 2.327,1 euros. En el mismo periodo de 2012 llegó a 2.265,74. Ese incremento de apenas 61 euros en diez años supone un 2,7%.

La encuesta anual se elabora con los datos trimestrales con correcciones, por lo que aún no se puede conocer el sueldo medio en 2022 para compararlo con el sector público. Pero de mantenerse la tendencia de años anteriores, en los que el salario crece a lo largo de todo el ejercicio, y teniendo en cuenta que ya se están firmando convenios con alzas superiores, el promedio apunta a una cifra cercana a 26.950 euros, con lo que se daría una subida del 3,6% respecto a 2012.

Esta evolución tampoco ha sido lineal. El dato más alto de la serie reciente se alcanzó en 2011 con 26.560,23 euros de sueldo bruto anual. En 2012 y 2013 bajó, y tras recuperarse en los dos años siguientes volvió a caer en 2016 y 2017. A partir de 2018, con un nuevo descenso en 2020 por la pandemia, recuperó la senda alcista hasta situarse en 2021 en una cifra muy similar a la de diez años antes.

En conclusión, frente a un 13,3% de subida en el sector público estatal en diez años, que se reduce al 11,1% en el autonómico (con 50.000 empleados en la región), en el ámbito privado el incremento en el mismo periodo ronda el 3,7%.

Este dato aún no es definitivo y además la encuesta del INE no incluye a ciertos sectores, como la agricultura. Pero hay que tener en cuenta que sí abarca al sector público, con lo que la subida real en el privado está por debajo de lo indicado.

De todas formas, en ambos casos las subidas de sueldo están muy lejos de la evolución de los precios. Según los datos del INE, entre enero de 2012 y septiembre de 2022 el IPC ha crecido un 20,1% en Extremadura. Pero lo cierto es que un funcionario, aunque sigue lejos de esa subida, ha podido capear esa escalada mejor que un trabajador de la empresa privada.