El PSOE extremeño no aceptará que la financiación sea «moneda de cambio»

«Un Estado troceado no reparte solidaridad», abundó el líder de los socialistas extremeños, en línea con lo manifestado al respecto desde el pasado viernes por el partido, y fue tajante al mostrarse en contra de las manifestaciones de la ministra de Hacienda y vicesecretaria del PSOE, María Jesús Montero, respecto a la «singularidad» de Cataluña.

«El PSOE de Extremadura no va a aceptar que la financiación autonómica sea moneda de cambio en la negociación de ningún Gobierno», remarcó Gallardo, quien reiteró asimismo que «los territorios no tributan, lo que tributan son los ciudadanos». Por ello aspira a que se apruebe una financiación autonómica por la cual «un ciudadano que vive en Madrid que tenga la misma renta que un extremeño tenga los mismos derechos y también tenga las mismas obligaciones».

Por lo tanto, no aceptarán «singularidades que tengan que ver con privilegios», sino una financiación autonómica que recoja en un documento «las singularidades de las comunidades y que esas singularidades se puedan trasladar en igualdades».

«No podemos aceptar bajo ningún concepto que un sistema de financiación esté en torno a una negociación ni mucho menos en torno a los territorios. No aceptamos privilegios», aseveró Gallardo en una rueda de prensa en Mérida con motivo de la constitución del Consejo Municipal de PSOE de Extremadura.

Por el contrario, aceptarán un sistema de financiación «justo», que aborde «la singularidad de cada territorio, pero de ningún territorio en concreto», que es la propuesta del PSOE «de la que nunca se ha movido».

Preguntado por si hay distanciamiento entre el PSOE regional y el federal, remarcó que los socialistas extremeños han defendido siempre, y lo van a seguir haciendo, «los principios del PSOE», que son los de la «solidaridad que solo se ejerce si hay una financiación justa, que sea equitativa», señaló, para remarcar que cree que defienden «lo mismo».

Por su parte, el portavoz regional del PP, José Ángel Sánchez Juliá, subrayó el rechazo de su partido a que algunas regiones puedan recibir un «tratamiento especial» por parte del Gobierno central en materia de financiación, y confió en que al PSOE regional liderado por Miguel Ángel Gallardo «no le flaqueen las piernas» y se mantenga en la unidad que hasta el momento demuestran los partidos.

Tras incidir en que Pedro Sánchez «quiere comprar la investidura de Illa con el dinero de todos los españoles y todos los extremeños», remarcó que el PP en la comunidad «no lo va a consentir». Añadió que espera que los partidos se mantengan en la unidad en la defensa de una financiación justa evidenciada a través de la declaración institucional rubricada en la Asamblea.

«A Extremadura tienen que llegar las infraestructuras que el Estado nos debe», espetó como ejemplo el popular, quien subrayó que desde la región hay que defender con unidad un sistema justo que «también mire por los extremeños y a todos por igual».

Finalmente, la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, mostró el «máximo rechazo» de su grupo a la propuesta de financiación singular para Cataluña. «Es un eufemismo para decir que quieren un sistema de financiación lleno de privilegios para una comunidad autónoma», dijo.

De Miguel también exigió que se deje de beneficiar a las comunidades más ricas «porque es el momento de que se ayude a las comunidades más necesitadas, como Extremadura, para que puedan converger con el resto de autonomías en igualdad de oportunidades». Por tanto, defendió un sistema de financiación justo y solidario, «algo que es totalmente incompatible con la propuesta que ha hecho ERC al Gobierno de España».