«Existe la percepción de que el voto no va a cambiar nada su vida»

Profesor de la Universidad de Extremadura y sociólogo, Marcelo Sánchez-Oro insiste en que la desafección política de las que denomina «clases populares» tiene una «explicación compleja». Pese a ello, ofrece un claves que pueden ayudar a comprender esta situación.

-¿A qué se debe la menor participación en las elecciones que se detecta en algunos barrios de Extremadura?

-La desafección política de las clases populares tiene una relación con la decadencia de la conciencia de clase obrera.

-¿En qué barrios se da esta circunstancia?

-Estamos ante una sociedad dividida y existe lo que denominan algunos sociólogos 'el contenedor de los excluidos', que son precisamente grupos en exclusión o en riesgo de estarlo. En ese contenedor se percibe una escasa organización que impide tener peso en la negociación social y también en la política. Son colectivos que no están articulados en torno a organizaciones ni sindicatos ni partidos políticos ni movimientos sociales.

-¿En qué se traduce?

-Existe una percepción de que el voto no va a orientar ningún tipo de cambio social, no va a servir para nada ni a cambiar su vida de ninguna manera. Además, los manuales más recientes, como el de Owen Jones, ponen de relieve la paradoja de que hay poca votación y esos votos van dirigidos a partidos de derecha o de extrema derecha.

-Es algo que en Extremadura, de momento, no sucede. La opción mayoritaria en estas barriadas son los partidos de izquierda.

-Es una tendencia de cara al futuro. Extremadura es un 'microuniverso' y hay un comportamiento de sociedad tradicional en el que prevalece el elemento de conservar lo que hay y en el que el estado del bienestar tiene todavía una cierta solución a los problemas más inmediatos.

-¿Cómo se puede revertir esta situación?

-La manifestación de la abstención o del voto a la derecha o extrema derecha es una expresión de un problema más serio: el modelo de sociedad que estamos construyendo en el que hay grupos cada vez más importantes excluidos de la lógica participativa. Para revertirlo habría que cambiar el modelo de sociedad. Las políticas participativas que hasta ahora se desarrollan no parecen suficiente. Harían falta liderazgos y partidos muy pegados al terreno. En un momento determinado Podemos llevó a cabo este intento de sintonizar con estos grupos, pero actualmente se percibe una sensación de fracaso y desilusión

-¿La abstención seguirá creciendo?

-En las últimas elecciones en Portugal la abstención fue del 45%. Es algo a lo que España, en su conjunto, no llega, aunque sí sucede en algunos distritos determinados. A medida que la clase media se va precarizando esa desafección se incrementa. También es verdad que en Extremadura la clase media no ha disminuido tanto como en otros lugares y sigue representando un 64% de la sociedad. Es un peso elevado y tiene relevancia, con lo que matiza la estructura.