El Badajoz destituye a Iñaki Alonso

En anteriores encuentros, desde la grada ya se había pedido la cabeza del técnico vizcaíno e incluso la Plataforma Sentimiento Blanquinegro y otros sectores de la masa social le habían solicitado su dimisión, pero este domingo empezaba a ser más unánime esa petición tras un partido impropio de un equipo que se juega la vida en la categoría. '¡Iñaki vete ya!' se escuchó en varias ocasiones del duelo ante el Navalcarnero que se saldó con empate sin goles. «Hemos hecho uno de los peores partidos desde que llegué aquí», comentaba el preparador vizcaíno minutos antes de conocerse su despido.

Ha sido la gota que ha colmado el vaso y llega cuando apenas restan nueve partidos para finalizar el curso. El técnico vizcaíno cogió al equipo pacense a finales de octubre tras la destitución de David Tenorio cuando estaba ubicado en la antepenúltima posición a un punto de la salvación y 18 partidos después lo deja en la zona de la quema, a cuatro puntos del playout (que realmente son cinco porque el Ursaria, que ocupa ese puesto, le tiene ganado el golaveraje) y cinco de la permanencia. En ese periodo ha sacado cuatro triunfos, siete empates y siete partidos perdidos, a todas luces un balance insuficiente para solventar la situación de un equipo que se ha ido hundiendo cada vez más.

Bajo su tutela, parecía que se enderezaba el curso de los acontecimientos, logrando acumular tres victorias consecutivas tras la derrota del debut ante el Navalcarnero, saliendo de la quema por primera vez, pero fue un espejismo, porque a partir de entonces los pacenses no fueron capaces de volver a ganar hasta el duelo ante el Numancia hace dos semanas. Una secuencia que duró once partidos.

En un escueto comunicado, el Badajoz «agradece a Iñaki su profesionalidad, compromiso y lealtad con el club y le desea mucha suerte en sus futuros proyectos». A partir de ahora se hará cargo del equipo Juan Carlos Román, que estaba ejerciendo de segundo técnico.