Peregrinos de paso camino de Lisboa

Los jóvenes crean un círculo entre cantos y danzas para celebrar la liturgia de la mañana. Frente a ellos, las mochilas que les acompañarán en su camino se encuentran amontonadas.

La mayoría de los jóvenes acompañan al sacerdote, uno más entre ellos. Sin embargo, algunos rezagados, presos del cansancio, apoyan a sus paisanos desde la lejanía mientras se toman un mate.

Los vecinos de la zona se aproximan al grupo, curiosos por lo peculiar de la situación: decenas de muchachos cantándole a la vida junto al párroco que lidera el laudes.

Y este es tan solo uno de los grupos que atraviesan la ciudad como puerta al país luso, donde finalizará su peregrinación en compañía de decenas de miles de jóvenes provenientes de diferentes países y regiones españolas. Grupos de chicos de entre 16 y 30 años se han embarcado en este viaje «dispuestos a vivir una experiencia única e inolvidable».

«En estos días esperamos que el mundo pueda ver que hay jóvenes que quieren ser católicos, que buscan seguir a Jesucristo. Y ese es el objetivo, mostrarle al mundo que seguimos luchando por la Iglesia», indica Juan Santiago, uno de los peregrinos que pasan por Badajoz.

La primera edición de la Jornada Mundial de la Juventud se celebró en Roma en 1986 y 37 años después, este movimiento internacional ha recorrido 13 países. Entre los asistentes, muchos repiten la experiencia tras haber estado en algunas de las reuniones celebradas con anterioridad. Para otros es la primera vez.

Una de estas jóvenes inquietas que se aventuran a vivir la experiencia es Vicenta López. «He querido asistir otros años pero no ha sido posible. Así que desde que surgió la ocasión, hice todo lo posible por poder venir con el Camino Neocatecumenal, que es donde me han inculcado la fe».

López es una de las integrantes del grupo de Uruguay que hizo noche en Badajoz en el día de ayer.

Esta numerosa agrupación viene de tres parroquias de Uruguay: la de San Miguel de Montevideo, la de Las Minas de Lavalleja y la de Santa Teresita. Además hay integrantes de Riviera y de La Paz.

Durante su estancia en la ciudad coinciden con otro grupo nacional proveniente de Gandía (Valencia), con el que realizan laudes y evangelizan por las calles de Badajoz. A lo largo de esta semana, peregrinos de todo el mundo se alojan en instalaciones parroquiales, públicas y familiares. «No sabemos dónde nos quedamos porque nos vamos enterando a medida que avanza la peregrinación», explica Cecilia Viñes, otra de las asistentes.

Estos días realizan actividades en las diferentes localidades por las que pasan, mientras que, en palabras de López, llevan «la palabra de Dios al pueblo».

Actividades que tienen como colofón los actos que desde el miércoles preside el Papa en Portugal. «Esperamos conocer a personas de culturas diferentes, evangelizar por las calles y, sobre todo, presenciar la vigilia con el Papa Francisco. Estoy deseando que llegue el momento porque en Panamá fue de las mejores partes de la Jornada Mundial de la Juventud», rememora Santiago.

«Todo aquel que dude de venir, debe hacerlo. Esta experiencia me ha hecho crecer al tener la posibilidad de viajar a otro país, enriquecerme con otras culturas y abrir más la mente», explica Mariano Sevilla, uno de los peregrinos que ha presenciado estas jornadas en varios países.

Además de este numeroso grupo, el pasado martes otros integrantes del Camino Neocatecumental entraron al país vecino en cinco autobuses. Uno partía directamente de Badajoz y el resto lo hacían desde Cáceres y Plasencia.

Además, un grupo de 60 jóvenes de la parroquia de la Moraleja de Madrid, pasaron por el Convento de las Carmelitas de Talavera la Real.

El colegio San José de Villafranca de los Barros también ha hospedado a 200 jóvenes de catorce países diferentes.

En Mérida, la Basílica de Santa Eulalia ha acogido a 120 peregrinos de tres parroquias de la diócesis de Asidonia-Jerez: la Parroquia de San Rafael (de Jerez de la Frontera), la de San Joaquín (del Puerto de Santa María) y la de Nuestra Señora de los Ángeles (de Sanlúcar de Barrameda), todas del camino Neocatecumental.

También han pasado más de 150 jóvenes provenientes de Madrid (del colegio Santillana y de la parroquia Virgen del Cortijo) y 135 de la Congregración de don Orione de Italia.

La Escuela de Formación Agraria de Valdivia y la de Guadaljucén de Mérida también se convierten en refugio para los peregrinos, que a su paso por la región, han aprovechado para visitarla y conocer enclaves como Guadalupe o el embalse de Orellana.

Por Badajoz pasaron el 30 de julio otros 50 peregrinos de Polonia que se alojaron en el Salón Multiusos de Gévora. También habrá peregrinos de Chile, Dubai, Venecia y Puerto Rico

Desde hoy, miles de jóvenes cruzarán la frontera de Caya camino de Lisboa, donde se celebra hasta el domingo la JMJ.