Mercedes Morán, en su despacho en la Consejería de Agricultura en Mérida. J. M. Romero
LENGUA AZUL EN EXTREMADURA

La Junta reitera que no dará ayudas directas por la lengua azul e insta al Ministerio a ponerlas en marcha

Mercedes Morán insiste que los fondos propios de la comunidad autónoma se destinarán a la compra de las vacunas

Lunes, 14 de octubre 2024, 13:47

La Junta de Extremadura no tiene entre sus prioridades la de destinar ayudas directas a los ganaderos afectados por la lengua azul en sus explotaciones. ... A falta de datos por parte de la Consejería de Agricultura sobre el número de ovejas muertas y animales de explotaciones en las que se ha detectado la enfermedad, se sabe por información oficial del Ministerio de Agricultura que existen 85 focos oficiales de lengua azul. De ellos, 35 se corresponden con el serotipo 3, el más virulento.

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«Todo el dinero del que disponga la Junta irá destinado a vacunación de la cabaña ganadera como prioridad, porque «es lo que va a facilitar los movimientos y porque es lo que va a salvar la cabaña», ha dicho esta mañana en Barbaño la consejera de Agricultura y Ganadería, Mercedes Morán.

«Las posibilidades económicas del Ministerio (de Agricultura), del Estado, son mucho mayores que las nuestras. Te repetido por activa y por pasiva que todo el dinero que consigamos va a ir destinado a poder vacunar toda nuestra cabaña ganadera, porque es lo que va a facilitar los movimientos. Y esa es la prioridad», ha sostenido Morán.

La semana pasada, la organización nacional de Unión de Uniones, cuya cabeza visible es el extremeño Luis Cortés, reclamó ayudas directas por parte de las Administraciones. José Antonio Martínez, ganadero y responsable de ovino y caprino de leche de Unión de Uniones, expuso de forma específica que «Francia ha puesto en marcha un presupuesto importante para ganaderos afectados, desde España se debe trabajar en la misma línea y prepararnos para dar una respuesta rápida a los ganaderos que puedan verse afectados o ya lo estén».

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Al mismo tiempo, Martínez dijo que las administraciones sufraguen el coste de la vacunación incluso en zonas de vacunación voluntaria, lo que permitiría conseguir avances importantes en la prevención de la aparición de nuevos focos en zonas aún no afectadas. Asimismo, reclamó un rápido desarrollo de vacunas polivalentes en zonas afectadas por más de un serotipo, de cara a garantizar una menor incidencia de la vacunación sobre los animales.

También esta organización agraria estimó «inaceptable» que las comunidades autónomas planifiquen compras de vacunas para vacunación obligatoria en números de dosis menores que la cabaña ganadera que, por los registros de animales, saben bien su número. «No puede ser que nos encontremos en zonas de vacunación obligatoria, con restricciones a movimientos de animales sin vacunar, y las CCAA no planifiquen un abastecimiento suficiente, dan al traste con el objetivo de conseguir una amplia cobertura vacunal», apuntó José Puig, ganadero y responsable de ovino y caprino de carne de Unión de Uniones.

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Preguntada Mercedes Morán por esas consideraciones de Unión de Uniones, que «nunca el Ministerio ha puesto ayudas encima de la mesa, y a lo largo de estos 15 años que hemos tenido lengua azul tampoco se han puesto ayudas». El 9 de octubre de 2007, HOY recogió una serie de ayudas puestas sobre la mesa por parte del Ministerio de Agricultura. En concreto, una indemnización que osciló entre 56 y 96 euros por cada animal muerto. Estaban fijadas por una orden del Ministerio de Agricultura, concretamente la APA/1438/2005.

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Además se conoció entonces que los ganaderos damnificados por la lengua azul también tendrían la posibilidad de optar a ayudas para reposición de la cabaña, esto es, para sustituir a los animales desaparecidos. Esta podría ser interna o externa, en función de si son criadas por el propio ganadero o compradas, según informó Antonio Prieto, responsable, como ahora, de Ganadería de UPA-UCE.

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Finalmente, los ganaderos andaluces y extremeños pudieron disfrutar de ayudas directas para paliar su situación de desventaja en los mercados. Al tratarse de zonas afectadas por la lengua azul, los productores venden sus animales en la lonja a unos precios más baratos que los del resto del país. Para compensar esta pérdida de poder adquisitivo, se percibirá una cantidad por cada animal que oscilaría entre los 3 y los 7 euros, se comunicó en la anterior gran crisis sanitaria animal originada por la lengua azul.

De Miguel pide explicaciones

 Por otra parte, la portavoz de Unidas por Extremadura ha advertido de que el problema de la lengua azul en la comunidad «es terrible, con focos ya incontables», y ha avanzado que su grupo pedirá explicaciones en la Asamblea a la consejera de Agricultura, Mercedes Morán, por su gestión «nefasta en esta materia».

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Ha reprochado, en concreto, a Morán la falta de comunicación al sector, así como la tardanza en el inicio de la vacunación, ya que «han tardado más tiempo del que se recomienda y se aconseja». «Sabíamos lo que estaba sucediendo antes incluso de que comenzara la Feria de Zafra, y la tardanza ha supuesto la pérdida de muchas cabezas de ganado y que se vacune más tarde de lo aconsejable», ha espetado.

Asimismo, ha lamentado el «mensaje que (por parte de la Junta) se está lanzando al sector, que necesita certezas, también un cierto consuelo y necesita saber que va a haber ayudas a la reposición que va a impedir que se cierren las pequeñas ganaderías», algo que -ha criticado- no está sucediendo«.

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Así, Irene de Miguel ha considerado que «la consejera está demasiado ocupada en dar explicaciones por el pozo ilegal del que es copropietaria que realmente por afrontar un problema de esta dimensión que va a afectar a la mayor parte de las ganaderías de la región»; y ha avanzado que Unidas por Extremadura va a pedir explicaciones en la Asamblea cuando sea posible.

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