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Viernes, 25 de mayo 2018, 13:35
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Un juzgado de Cáceres ha concedido la incapacidad permanente total para su profesión habitual a un obrero que no estaba de alta o situación similar, uno de los requisitos necesarios. El trabajador no se había inscrito en los últimos 24 meses como demadante de empleo. Durante ese tiempo, se había dedicado a cuidar de sus padres gravemente enfermos, además de estar también enfermo él mismo.
El juzgado considera que no se inscribió por desidia sino por las circunstancias familiares y propias y tiene en cuenta su dilatada carrera profesional. La sentencia ha sido confirmada por la Sala de lo Social el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
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